Una pequeña cualidad de Mono es coleccionar sombreros y usarlos en el momento adecuado, como cuando va con el cazador usa el de cola de mapache.
La mayoría de los niños del Refugio tienen sus ojos ocultos por su cabello o por la sombra pero algunas vez han mostrado su cara ante los demás, pero Mono nunca lo hizo, de igual manera nadie se atrevió a preguntar porque oculta su cara bajo los sombreros que porta, todos respetan eso.
Tal vez... ¿Para olvidar? Pero si es así ¿qué?
El pequeño bote comenzó a avanzar cuando Mono lo empujó del borde con ayuda de un palo y todo esto sin haber soltado la mano de Seven ni un solo segundo, Verónica sonrió viendo aquella tierna escena, sabía que su compañero no confiaba mucho en la gente a menos de que sea un gnomo, apenas había logrado ganarse su confianza pero parece que Mono le llevará la delantera pues ¡es tan amable con ellos! de igual forma aún no sabe porque la actitud de Seven es así ¿por qué será?
Gracias a las corrientes de agua Mono no tuvo que hacer muchos movimientos con el "remo" para guiarla a la cuidad, cada vez que hacia un movimiento tenía que usar una sola mano y aplicar bastante fuerza ya que el pobre chico de camiseta azul era prisionero ante el miedo que no se atrevía a soltarse para ayudar a Mono. Seven era más de dar abrazos que tomar la mano por lo que no dudaba en ningún segundo apegarse al cuerpo del azabache cuando una pequeña ola golpeaba el bote, esto no molesto en lo absoluto al otro, lo entendía muy bien, y si eso mantenía al niño más tranquilo estaba mas que dispuesto a ser todo lo posible para calmarle.
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Cuando el barco tocó tierra firme el agarre de Seven disminuyó un poco pero no se rompió, al ver el lugar a más detalle Verónica quedó asombrada por lo altos que eran los edificios y por lo desgastado que estaban a tal punto de parecer que caerían en cualquier momento, pero se mantenían impresionantemente inclinados apuntado el suelo, pero firmes.
-Y aquí estamos- dijo Mono mientras ayudaba al chico a bajar del vote- la cuidad Pálida....-
-¿En dónde se encuentra ese tal Refugio?- preguntó Seven apartando la mano de Mono cuando sus pies llegaron a tocar tierra firme, estando avergonzado de si mismo, a lo que el azabache soltó una pequeña risa por su actitud y prosiguió a contestarle.
-Bueno, hay un pequeño detalle sobre eso- rió un poco nervioso pero su acción hizo que los dos niños los mirarán fijamente sospechando de sus acciones- ¡W-wow! Hey tranquilos, no los engañé ni nada parecido, el Refugio está un poco lejano en este punto, por lo que tendremos que atravesar casi media cuidad-
-¡Oh, entiendo!- exclamó Verónica sonriendo nuevamente, una confianza rápida- pero si tú vienes desde haya y apareciste de la nada en la cabaña de ese hombre ¿por qué no haces lo mismo con nosotros? ¿O no puedes?- ladeó la cabeza un tanto curiosa.
-Hmm...- miró a otro lado dudando de que responder, odiaba hablar de sus poderes pero no quiere crear más desconfianza- Si puedo, pero... Hay bastantes... dificultades- suspiró al recordar todo lo que vivió- Puedo teletransportarme atreves de los televisores, normalmente a uno cercano pero puedo elegir el lugar siempre y cuando, este encendido un televisor, si bien se complica un poco poder llevar a alguien más... pero el verdaderos problema es que un televisor se puede romper, como ven la cuidad está bastante decadente y varios televisores son bastantes viejos, por lo cual al atravesarlo existe la posibilidad de que eso pase, no puedo llevar a los dos a la vez por más que quisiera- explicó un poco avergonzado- si me arriesgo y eso pasa, tardaré mucho en volver a llevarme al otro debido al largo camino y lo dejaría a la intemperie por bastante tiempo, así exponiéndolo al peligro, además... Aquí los televisores son peligrosos-
-¿T-tienes poderes?- retrocedió Seven un tanto sorprendido, no tenía lógica que aquel niño apareciera de la nada por lo que pensó que era un plan del Cazador para poder matarlos, pero justo ahora acaba de recordar a 'La Dama' y su oscuro poder... Ellos... Pueden der iguales.
-Si... Supongo- se encogió de hombros un tanto incómodo- Bueno... Para llegar al Refugio existe un camino más seguro para evitar a los "monstruos", en el camino les explicaré lo que es la cuidad hoy en día para que no se queden con las dudas jeje... - cambió de tema rápidamente dejando a Seven un tanto confundido.
-Muy bien Mono ¿a dónde iremos primero?- preguntó emocionada por la nueva aventura, si bien El Nido le dejó bastante mal, el pensar que hay un lugar en el que es bienvenida le hacía tener esperanza.
-Hay un lugar que queda de paso por nuestro camino "seguro" y como encargado de proteger a los niños de esta ciudad y haber formado el Refugio, debo de revisar bastantes lugares, los que trabajan para mí y custodian a los niños a la espera de que yo llegue, siguen siendo adultos como el Cazador por lo tanto debo ir regularmente para mantener el orden, así que... ¿A quién le gusta la escuela?-
-¡¿Escuela?!- tantos Verónica como Seven hablaron al mismo tiempo- ¿que es escuela?- finalizo la chica.
-Espera, espera... ¿Cómo es que los adultos traban para ti? ¡Se supone que nos odian!-
-Ya cálmate Seven, de seguro ellos no son malos, tal vez no todo nos detestan- ánimo la chica de impermeable cubierto de tierra- no todos pueden ser el villano del cuento ¿sabes?-
-¡Andando!- exclamó Mono tomando la delantera del camino.
Las cursivas... ¿forman algo coherente? 🤔
¿Cuáles será las reglas de Mono?
¿Por qué se llama Mono?
El inicio siempre cuanta algo de Mono...
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El niño de la ciudad
FanfictionEl bucle se ha roto, pero los monstros siguen acechando... Entre las esperanzas de sobrevivir de aquellas pesadillas surge un líder. Un nuevo orden ha sido creado, donde los adultos de Ciudad Pálida obedecen al peculiar niño con sombrero fedora. Los...