Una chica poco honesta con sus sentimientos hacia un joven despistado pero valiente, comprenderá que no es muy diferente a el, y empezara a sentir algo por el.
Asta acaba de despertar en un lugar carente de luz y esperanza, cuando recobro un poco la conciencia pudo ver su alrededor y la desventajosa situación en la que se encontraba.
Asta: ¿Cómo es que...? – Dijo mirando a su alrededor.
Él se encontraba en una especie de pedestal rodeado de lo que parecen ser una especie de columnas oscuras, en las cuales estaban parados Belfegor y Astaroth, este último se mantenía rodeado por un alo oscuridad que impedía verlo
Belfegor: Veo que, al fin despiertas, por cierto, tienes un grimorio muy curioso – Dijo sosteniendo el grimorio de Asta.
Asta: Espera... - Dijo para después mirar su propio cuerpo y ver que estaba intacto – Ufff... Creí que estaba muerto.
Belfegor: Eres bastante importante para nosotros, no seriamos capaces de perder tu valiosa cooperación... - Dijo señalándolo con uno de sus tentáculos.
Asta: ¿Importante?... ¿Cooperación? – Dijo confuso aun tratando de recobrar el aliento.
Belfegor: Efectivamente niño, para contarte mejor nuestro plan de invasión, le doy la palabra a Lord Astaroth, soberano gobernante del inframundo...
La columna donde estaba Belfegor se alejó de Asta, mientras que Astaroth se mantenía imponente y con su inmenso tamaño en frente de Asta.
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Belfegor: Astaroth, el niño no supone problema alguno, solo confié en mí... - Dijo reclinándose en frente del demonio.
Astaroth se dirigió donde Asta, cuando su alo de oscuridad empezaba a desaparecer, sin quitarle la mirada en ningún momento, con una voz grave y tenebrosa se dignó a hablar.
Astaroth: Asta... joven mortal... portador del demonio de la anti magia... es digno conocerte...
Asta: Sigo sin entender lo que está sucediendo...
Belfegor: Tu magia será útil para Astaroth, por eso decidimos... traerte, matarte no era una opción...
Asta: Matarme... ¡¡¡me pusiste una maldición que me iba a matar!!!
Belfegor: No me grites joven – Dijo amenazándolo con uno de sus tentáculos – Te recuerdo que sigues en desventaja en este lugar.
Astaroth: Cálmate Belfegor... La maldición te la pusimos para evitar que escaparas y darte una falsa esperanza de que podías salvarte, atrayéndote a nosotros... aunque al final no pusiste resistencia.
Asta: Si, aunque no me esperaba esto, muchas coincidencias.
Astaroth. Es porque te estuve observando desde el inicio Asta, en tu mundo tengo ojos por todo lado, contándome tu progreso y avance en el control de tu poder.
