Silent Love- Edward Cullen

"𝐒𝐚𝐥𝐢𝐝𝐚"

MUERDO MIS LABIOS Y MIS MANOS SE mueven entre ellas solas. Estoy nerviosa, estoy siendo el centro de atención en este momento y no me gusta para nada.

Edward esta frente a la mesa, con su mochila colgada en su hombro izquierdo luciendo tan relajado pero a la vez intranquilo gracias a sus expresiones faciales.

El, Bella y el profesor están en una riña de la cual yo soy, lamentablemente, parte de ella. Considero el levantarme de mi asiento para tomar el lugar que ninguno de los dos, Edward o Bella quieren tomar, que es alado de Mike, el cual es molesto pero no es tan malo para salir de esta situación.

Una parte de mi quiere escapar y la otra quiere quedarse en el lugar en el que estoy, porque no e visto a mi compañero hace días y parte de mi extrañaba estar con el.

Nunca e comprendido lo que sentía por Edward, sabía que no era amor, porque aunque hemos hablado mucho en las clases yo no sabia como era en realidad en su casa o con su familia, tampoco sabia el porque de muchas dudas que se formaban en mi cabeza, las cuales no revelaba por una razón.

Aunque quiera saber no es de mi incumbencia los asuntos de otras familias y a menos de que el me las quiera contar yo jamás me entrometeria por mi misma en ellos.

Creo que era algún tipo de crush, porque vamos.

¡Edward es guapo! lo admito y lo repito.

Es guapo.

-Tiene que entender señor Cullen que es imposible que vuelva a tomar su asiento, al menos por el día de hoy, por sus días ausentes la señorita Swan a tomado su lugar con la señorita Holland y es imposible cambiarla a otro asiento-.

-Es mi lugar- sentencia Edward dandole una mirada impaciente.

Y eso es lo que venía sentenciando ya hace tres minutos. Bella que estaba a mi lado se mordía las uñas mientras su mirada intercambiaba de mi a Edward como un partido de pin pon.

Derrotada suelto un suspiro, el cual nadie escuchó, para levantar ligeramente la mochila de mi mesa, pero una mano se apoya en ella haciendo imposible levantarla.

A ver, prefería romper el hielo y irme que a estar un minuto más aquí, además que resolvería el problema ya que por lo visto ni Edward o Bella tenían la intención de dar su brazo a torcer.

Antes de que pueda decirle algo a Edward o quitar su mano de mi mochila, el profesor suspira.

-Señorita Swan, el trabajo que dejé para hoy, su compañera y usted ¿ya lo terminaron?-.

Una Bella derrotada asiente mientras pasa el trabajo por el cual anoche había dormido poco. El profesor lo toma y verifica.

- En ese caso, señorita ¿puede tomar asiento con el señor Newton?.