Capítulo 3 - Estrellas

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El castaño había terminado por salir de sus pensamientos para cuando escucho que la muchacha finalmente había llegado, parecía que había puesto a hornear el pequeño pay en el horno, así que tenía tiempo para ponerse a charlar con él, había llevado consigo un par de vasos con jugo de manzana así que se sento en las escaleras a lado de el mientras le miraba de reojo. Nunca habían sido especialmente cercanos, pero, de alguna manera recordaba que él siempre había sido un buen amigo para ella cuando más lo había necesitado, quizás era la razón por la cual le daba gusto saber que le había ido bien durante esos años que había pasado fuera.

-La vista ha cambiado bastante, ¿No te parece?-  Imagino que era una buena idea para terminar de romper el silencio que había entre ambos, al final ella también comenzaba mirar de forma considerable la forma en que había cambiado el paisaje durante  los últimos años se sentía orgullosa de que al menos antes de morir era no hubiera podido cumplir con su última voluntad -A veces siento que estoy soñando-

-También es raro para mi saber que las murallas se fueron... Hace unos años parecía ser un sueño nada más, algo que seguramente sólo pasaría en el más loco de nuestros sueños- Al final recordaba que durante su tiempo como reclutas la esperanza de que algún día esas enormes murallas que los habían  protegido durante siglos finalmente cayeran, era realmente extraña y fuera de lugar, lo más seguro es que para cuando ese día llegará ellos ni siquiera estarían presentes el hecho de saber que ellos habían formado de ese plan para finalmente destruirlas era bastante extraño -Pero me da gusto en parte-

En el fondo no podía sentirse completamente tranquilo puesto que aún no aceptaba que el 80% de la humanidad sobre la faz de la tierra hubiera tenido que ser sacrificada para que lograran ese sueño, desde su punto de vista había sido un pago demasiado alto para poner su libertad a costa de la libertad y de las vidas de muchos otros que dentro de todo no habían tenido la culpa, todos habían sido víctimas de las ideologías de Liberio, a final de cuentas había algunos que habían pagado sin siquiera haber hecho nada tal y como muchos en Eldia habían muerto a manos de los Titanes sin siquiera haber hecho nada. Sin embargo por más que estuviera en contra de eso era algo que yo no podía cambiar y que dentro de todo tenían que aprender a aceptar todos habían tenido que entregar una parte de sí mismo durante todo ese tiempo para poder llegar hasta donde estaban ahora y no había ninguna forma de tan siquiera arrepentirse Porque sinceramente no lo hacía aún con el alto por eso se habían ido que pagar sentía que había valido la pena Al haber liberado finalmente a la humanidad de la opresión que imponía Liberio a costa de los Titanes, ahora no eran más que simples humanos normales que tenían que crear armas de defensa a costa la tecnología que poseían sin tener que sacrificar como tal las vidas de niños inocentes que se sentían atados debido a la mera opinión y muchas veces, hasta los meros deseos de sus familias para subir de rango de forma desesperada para mantenerse con vida.

Sin embargo, no era precisamente de lo que quería hablar nunca habían sido cercanos y la verdad las pocas palabras que habían llegado intercambiar no eran más que meras conversaciones con menos palabras que nada, pues al final ella siempre había sido tan unida a Eren y Armin que ahora entendía que se le hacía extraño tener que convivir con sus amigos de nueva cuenta, el sabía mejor que nadie que ella necesitaba apoyo aún y cuando pareciera que no lo necesitaba, la había visto rendirse sentimentalmente apenas había visto a su mejor amigo y la verdad, sentía un poco de lástima por ella, no imaginaba lo doloroso que tenía que ser saber que tenías que cargar con el precio de haber asesinado con tus propias manos a la persona que alguna vez llegaste a amar. De cierta manera comprende que las palabras del castaño habían sido completamente ciertas en ese entonces mi casa siempre había sido una chica que había vivido para los demás siempre se esforzaba por mantener protegidos a los suyos aún a costas de su propio bienestar, y de su propia vida, no era para nada extraño que hubiera decidido retirarse luego de que las cosas finalmente hubieran terminado esos tres años parecía que le habían servido por encontrarse a sí misma y aún y cuando lograba verla un poco más calmada, sentía que necesitaba más. Siempre había creído que merecía haber tenido una vida mejor a la que le habia tocado. Era una chica dulce que quizás lo único que necesitaba era sentir un poco de afecto sabía que se comportaban una forma completamente diferente con Eren y Armin, quienes eran tienen la conocían desde que era pequeña, si bien, nunca le había preguntado exactamente qué era lo que había sucedido con sus padres porque no quería llegar a incomodarla, se había enterado por el rubio, al final nunca fue lo suficientemente cercano a Eren como para preguntar precisamente por el pasado de la chica que le gustaba imaginando que con eso de sus rivalidades, tarde temprano podría terminar usando sus propios sentimientos con la chica con quién había crecido desde que eran niños con el mero propósito de avergonzarlo frente a ella.

Más allá del finalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora