Más allá del final

Capitulo 34 - Atentado

Las cosas de poco en poco habían comenzado a salirse control, intentaron avisar a la gente de la forma mas discreta posible y de poco en poco las calles comenzaban a llenarse de personas que llevaban apenas lo necesario para ellos y sus respectivas familias, Eldianos y Marleyanos se miraban los unos a los otros completamente desconcertados ante lo que estaba sucediendo, los únicos que lograban entender el motivo por el cual tenían que salir cuanto antes de Marley eran los Eldianos, aquellos que habían conseguido escuchar la voz de Eren a través de los caminos una vez mas. Los chicos se habían asegurado de comenzar a sacar a los mas cercanos a ellos también, Connie apenas estuvo listo se enfoco en avisarle a la familia de Molly esperando que salir de Marley no fuera tan complicado para ellos, mientras que los demás se encargaban de que el resto incluso se asegurara de llevar el mayor número de provisiones posibles, nadie sabía de que manera saldrían los colosales en esa ocasión pero, era mejor asegurarse de que todas las reservas de comida y armamento con el que contaban estuviera bajo el mayor resguardo posible y ayudara a todos los que estaban huyendo ahora, no se sabía como serían recibidos en Paradis y aunque lo mas seguro era que Historia se encargaría de que todos contaran con un techo, comida y protección mientras se resguardaban en la Isla, era mejor siempre estar preparados para cualquier contratiempo que pudiera llegar a presentarse en cualquier momento y esa era una de esas ocasiones. Jean también se encargaba de ayudar en la evacuación junto con Mikasa quien estaba aun algo preocupada sin entender que sucedería o si tan siquiera tendrían una sola oportunidad de cambiar el final que pensaba dar Eren en esa ocasión a toda esa situación en la que ahora estaban envueltos todos de nuevo. 

Sin embargo, en el mar, las cosas estaban mucho mas tensas, John y Melody estaban en camino a Marley junto a un número considerable de Jaegeristas que estaban por demás contentos, iban cantando y celebrando mientras preparaban sus armas sabiendo de antemano que lo mas seguro es que apenas arribaran en Marley, se libaría un enfrentamiento entre los soldados que para ese punto ya estarían protegiendo el puerto de que ellos pudieran entrar, pues su misión había sido clara, no perdonarían la vida de ninguno que ni perteneciera a su gente que pretendiera huir a la isla para resguardarse del castigo que les esperaba, fuera hombre, mujer, o niño, todos tenían que quedarse a esperar la hora de su Juicio Final. Melody estaba mirando el mar mientras el barco se movía, John solo había suspirado y se había acercado a ella, por increíble que pareciera el no la detestaba por el mero hecho de pertenecer a una sangre diferente, para el, solo era una chica demasiado confundida que había cometido un error grave a causa de un mero capricho que ni siquiera valía la pena.

-Y pensar que apenas regreses a Marley, serás vista como traidora por tu propia gente- Hablo con mera ironía apenas se paraba a lado de ella -¿Sabes una cosa, Melody?, nosotros hemos perseguido esta causa durante años, sufrimos mucho gracias a las primeras guerras, enfrentamos muchas cosas que nos hicieron tomar esta decisión, de arriesgar algo por algo que valiera la pena... Por algo que queríamos conseguir, pero tu, solo terminaste con nosotros a causa de un mero capricho-

-¿Y que te hace pensar que es solo un capricho?- La muchacha le miro de reojo conforme cruzaba los brazos, todo mundo le repetía lo mismo de manera constante, que su insistencia hacía Jean no era mas que un mero capricho bobo que de poco en poco se convirtió en obsesión, dado que ni siquiera estaba enamorada realmente de el, al parecer nadie comprendía que sus sentimientos por el eran reales y lo único que quería era que el la viera del mismo modo.

-Porque tienes todo, naciste en un lugar privilegiado, con una familia que te podía dar todo lo que se te diera la gana, tu no sufriste maltratos, discriminación, o humillaciones por ser quien eres. Lo mas seguro es que desde que naciste si se te antojaba un baño, te llenaban una tina de agua caliente con esencias florales y te quedabas ahí durante horas sin que nada te preocupara. Tienes gente a tu servicio que hace lo que quieras, desde prepararte una comida basta, mañana, tarde y noche, duermes en una cama cómoda, y vistes las ropas mas finas y las joyas mas costosas que se te antoje lucir en el cuerpo, además de que eres una chica bonita y en una posición que te permitiría tener un marido a tu altura, no concibo entender, como precisamente alguien como tu se uniría a nosotros-