Capítulo VI

365 12 6
                                        

Las ganas que tenía de cambiar de aires no podía describirse con palabras, ni siquiera se le aproximaba. Me sentí tan relajada y despreocupada de todo, que parecía drogada por el paisaje que se cruzaba delante de nosotras.

La madre de Zach, Noia, siempre era la que nos llevaba a casa de Simón o a cualquier sitio que le pidiésemos. La conozco desde los tres años y es como una tercera madre para mí, ya que la segunda es mi abuela, no tengo muchos amigos pero me sobran madres… que cosas ¿no?

-Ya hemos llegado chicas- dijo Noia aparcando el coche- ya sabéis…

-Tenemos que tener cuidado de nosotras, pero más de nuestras bebidas- dijimos Zach y yo al mismo tiempo-.

-Veo que ya ha quedado todo claro- sonrió-.

-Nos vamos mamá, ten cuidado de regreso a casa- habló Zach saliendo del coche-.

-Adiós Noia, nos vemos luego.

-Cuidaros mucho.

Nos dejó en frente de la casa de Simón y tocamos la puerta.

-¡Teddy B, soy yo Moli!

-Jajaja ya verás con qué cara va a salir.

-¡Te he dicho mil veces que no me llames así!- gritó Simón desde el otro lado de la puerta-.

Para ser exactos, Simón podría ser jugador de baloncesto de la NBA. Mide alrededor de 1,97m y tiene una complexión parecida a la del actor Gerard Butler en la película de 300. En resumen, es bastante guapo, pero aunque tenga aspecto de súper macho, es muy amable y dulce con los demás. Es un contraste muy divertido.

-¡Hola chicas!- abrió la puerta con una sonrisa-.

-Hola Simón, me alegro de verte- intenté darle un abrazo y digo intenté, porque no conseguía llegar a su cuello-.

-Hola pequeña Kiara, me alegro de que pudieses venir al final- me levantó como si tuviese cuatro años-.

-Jajaja yo también, pero bájame que tengo vértigo- dije en tono de broma-.

-¿Y a mí no me saludas Teddy B?- hizo pucheros mientras cruzaba los brazos-.

-Lo que debería hacer es echarte de mi casa- cerró la puerta tras nosotras-.

-¿Por qué disimulas? En el fondo sé que te gusta que te llamé así.

-¿Y cuando el fondo es un agujero negro?- subió las escaleras-.

-Jajaja, dejad de discutir y vamos a prepararnos para llevar las cosas a la cabaña- empujé a Zach para seguir a Simón hasta su cuarto-.

-Como mis padres no están, llevaré yo el coche hasta las montañas- se sentó en la cama-.

-¡Vamos a morir!- gritó Zach para molestar a Simón-.

-Que graciosa.

Nos sentamos en el suelo delante de él y maquinamos lo que haríamos al llegar a la montaña.

Nos ofreció algo para picar y nos pusimos cómodas dejando las cosas en la cama de Teddy B. Zach empezó a contarle todo lo que había pasado en los últimos días, mi cara de querer matarla y la cara de Simón de asombro parecía un cuadro gótico.

-¡¿Qué?! ¡Enséñamelos ahora mismo!- Simón señaló mis brazos-.

-¿Por qué tuviste que decírselo Zach?- pregunté indignada-.

-Eso ya da igual, enséñamelos.

Me remangué la blusa a regañadientes y le enseñé la evidencia.

MAKTUBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora