MAKTUB

Capítulo XXV

Pido mil disculpas por la tardanza de verdad, pero es que estoy de vacaciones y no me queda demasiado tiempo para escribir. Puede que hayan faltas de ortografía y pido misericordia de ante mano que tuve que escribir algo apurada jajaja. Espero que os guste y no me odiéis por la tardanza.

Buen día a todos ^^.

Sí, lo confieso, no pude pegar ojo en toda la noche pensando en lo que pasaría mañana. Las preguntas surgían por si solas en mi mente en forma de cuestionario ¿a qué lugar me llevaría Derek? ¿sería en la ciudad o fuera de ésta? ¿me llevaría a comer o a dar un paseo? ¿iríamos a ver un partido de béisbol?. Espero que no se trate de eso, porque no me entero demasiado y lo que realmente deseo, es estar a solas para poder llegar a conocernos mejor el uno a otro.

Si lo pienso detenidamente, Derek no suele hablar mucho sobre su pasado, incluso diría que no le gusta ni siquiera mencionar el tema; pero ahora que somos novios (aunque aún no nos atrevemos a decirlo en voz alta) me gustaría saber algo más. Cuál es su música favorita, lo que más odia en el mundo (las mentiras es una de ellas), lo que más le gusta, porque decidió hacerse ese gran tatuaje en su espalda... en resumen, quiero saber todo sobre él antes de que nos conociésemos.

Supongo que ahora entiendo porque las personas enamoradas necesitan saber todo el... uno del... ¡NO!, ¡no quería decir enamorada, solo es una expresión como otra cualquiera, es como decir me gusta! ¡Si, eso es, quería decir me gusta!

-¡Kiara ¿se puede saber que estás haciendo?!- gritó mi madre desde el salón- ¡te llamé hace media hora!

-¡Lo siento, ahora mismo bajo!- grité desde mi habitación-.

El motivo de mi tardanza no era otra que mi ropa. Juré que jamás me mataría la cabeza pensando en que me pondría en una cita con un chico. Pues hay que tener cuidado con lo que se dice, porque un día llegará el karma con todo su poder y te hará tragar tus palabras.

Elegí unos jeans de tubo de color azul claro con algunos cortes en las rodillas y una blusa de color negro con encaje en la espalda. Me decanté por unas convers de color azul oscuro con pequeñas caritas sonrientes en color blanco.

No sabía qué hacer ni por dónde empezar. ¿Cómo se supone que se utiliza? ¿trae alguna indicación o contraindicación? ¿se debe seguir un orden? ¡¿Por qué es tan difícil maquillarse?! Nunca creí que necesitaría el kit de maquillaje que me regaló Zach hace dos años, incluso llegué a reírme en su cara... y creo que no estuvo bien.

No se me ocurrió otra cosa que mirar por internet para saber cómo debo hacerlo de forma correcta, no quiero terminar por parecerme a un payaso. Después de tardar una eternidad, bajé lo más rápido que pude y me acerqué hasta el salón para apaciguar el enfado de mi adorada y querida madre.

-Necesito que compres...- me miró extrañada por unos segundos- ¿a dónde vas?

-¿Por qué lo preguntas?- dije nerviosa al percibir su mirada de asombro sobre mí-.

-Estas realmente guapa- se levantó del sofá y se acercó inspeccionándome de arriba abajo- ¿eso es maquillaje?- pasó su dedo anular por mi mejilla y me aparté dando unos pasos hacia atrás-.

-Voy... voy a salir con unos amigos.

-Mientes- me miró directamente- has dudado y la voz te tiembla cuando lo haces.

-Jajaja, mamá eso no... eso no es cierto...

-Kiara Powell- volvió a clavar sus acusadores ojos sobre los míos-.

-Vale está bien, yo...- bajé la cabeza ya no pudiendo sostener más mi penosa mentira- voy a salir con un chico.

-¿Qué?- frunció el ceño incrédula-.