Capítulo XXIX

280 9 3
                                    

Otro capítulo más, espero que os guste. Que tengáis un gran día.









-¡Espera Kiara! ¡¿A dónde vas?!

No puede ser, por favor que no sea cierto.

-No... no puede irse...

-¡Kiara!

Zach gritaba desde el interior de la tetería al ver como recogía mis cosas y caminaba con prisa hacia la puerta para salir sin dar explicación alguna.

Necesitaba huir, salir de allí para pensar, para digerir lo que había escuchado de la boca de Morgan.

-No... no puedo res... pirar.

Me faltaba el aire, las piernas me fallaban con cada paso que daba hacia dios sabe dónde... pero no podía parar, no quería. Sabía que si lo hacía, caería al suelo y me sería casi imposible el poder volver a levantarme.

No recuerdo muy bien como llegué al parque que está al lado de mi instituto, pero sin darme cuenta, estaba sentada en uno de los bancos de aquel lugar mirando hacia la nada.

Por mi mente pasaban en forma de película todos los momentos que había vivido con Derek. El día que nos conocimos en el callejón, cuando me defendió de Patrick, nuestro primer beso, la historia de sus padres, mi historia... Todas las emociones que había vivido en aquellos momentos, me sobrepasaron hasta las lágrimas.

Por esta razón, tenía tanto miedo de enamorarme. Siempre quise mantenerme alejada de los chicos porque no quería sufrir, porque no quería que mis emociones o mi forma de ver o comprender la vida, dependiese de alguien más que no fuese yo. Si quería llorar, reír o maldecir a todo el mundo lo haría por mí, no por terceras personas.

Detesto que mis sentimientos le pertenezcan única y exclusivamente. Que solo pueda pensar en él, que mi felicidad dependa de su sonrisa o que su tristeza de lugar a la mía. Tengo pánico de no poder volver a mi vida normal si él no está a mi lado.

Tengo miedo.

Uh! bad boys watcha want, watcha want, watcha gonna do? when sheriff john brown come for you? tell me! whatcha gonna do? whatcha gonna do?...

Busqué en el bolsillo de mi abrigo para mirar de quien se trataba.

-Hola.

-¿Estás bien? ¿Por qué saliste corriendo de esa forma?

Podía notar angustia en su voz y me sentí culpable al instante.

-Lo siento, no quería preocuparte.

-Pues lo has hecho, creí que le había pasado algo malo a tus padres.

-No, ellos están bien.

-Ya lo sé, los llamé para saber si estaban bien. ¿Dónde estás ahora?

-Salí a caminar.

-¿No quieres decirme dónde estás?

Guardé silencio para confirmar su pregunta.

-¿Escuchaste la conversación de Morgan con Verónica verdad?

-Sí.

-¿Qué vas a hacer?

-¿A qué te refieres?- pregunté confusa-.

-¿No vas a despedirte de él?

-¿Eh?- dije sorprendida-.

-No te sorprendas tanto, al fin y al cabo entre vosotros hubo algo.

MAKTUBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora