Buenas queridos lectores. Me da un poco de tristeza decir que este es el último capítulo, pero todo tiene un principio y un final. Me sentí muy bien escribiendo esta historia y mucho más sabiendo que a algunas personas les gustó tanto como a mí.
Después de tanto tiempo, me encontraba de nuevo en mi ciudad natal y delante de la puerta de Morgan. Ya no solo se trataba de su casa, debido a que hace un par de años comenzó una nueva vida junto a Verónica, pero ahora los motivos que me traían aquí eran diferentes.
Sabía a ciencia cierta que la única persona que podía tener su número, era ella. Derek al marcharse, dejó todo atrás. Sus amigos, su familia y en especial a Kiara. Cortó todo contacto con las personas que alguna vez conoció y no dejó absolutamente nada que pudiese probar que alguna vez vivió en Bedelglan.
-¡Chicos me alegro de veros!
Verónica siempre fue muy amable con nosotros, pero con Kiara era diferente. Le tenía un cariño rozando casi lo maternal. La trataba como la hija que nunca tuvo y siempre nos visitaba cuando tenía trabajo cerca de nuestra fantástica morada.
-Hola Verónica, me alegro de verte- le di un fuerte abrazo-.
-Hola Verónica- Jared se inclinó un poco para darle un beso en la mejilla-.
-Pasad por favor, Morgan está en la cocina preparando un poco de té.
-¿Morgan preparando té? no me lo puedo creer- dije con ironía causando una sonrisa en ella-.
-Sentaos, ahora mismo vuelvo.
Nos señaló el salón y tomamos asiento esperando el tan ansiado té.
-Menuda sorpresa teneros aquí.
Morgan entró con su gran sonrisa y dejó el té en la mesa para luego tomar asiento junto a Verónica.
-¿Dónde está Einstein?- pregunté curiosa al no verlo saltar por el salón-.
-Está en la finca de mis padres.
-Oh, yo quería verlo.
-Tranquila, puedes verlo cuando quieras. Estará de vuelta la semana que viene.
El silencio reino después de las palabras de Morgan. Estaba ansiosa por la situación y no sabía cómo sacarle el tema a Verónica, pero no podía perder más tiempo.
-Verónica, necesito pedirte un gran favor.
Me miró sorprendida por mi repentino cambio de tema y no es para menos.
-Claro, puedes pedirme lo que quieras siempre y cuando pueda hacerlo.
-Es realmente importante.
-Dímelo y sabré si puedo ayudarte.
-Necesito el número de Derek.
Creo que hasta Jared se sorprendió por la forma en la que lo dije, es más, el pobre Morgan casi se ahoga con el té.
-¿El... el número de Derek?
-Necesito hablar con él sobre algo muy importante.
-Moli, no quiero parecer engreída, pero no creo que eso sea posible.
-¿Por qué?- pregunté decepcionada-.
-Derek me hizo prometer que jamás daría ese número a nadie. Sabes que ahora su vida es muy diferente a la que tenía antes y la privacidad es un lujo que muy pocos se pueden permitir cuando están envueltos en el mundo de los medios de comunicación.
-Si... si no quieres darme el número, por lo menos déjame hablar desde tu móvil.
-No se trata solo de eso. Él me dejó muy claro que no quería saber nada que tuviese que ver con su antigua vida aquí en Bedelglan.
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MAKTUB
Fiksi RemajaMi vida no podía ser más "perfecta": tenía una única amiga, mi clase y casi todo el instituto me odiaban y mi inexistente vida amorosa era eso, inexistente, no porque no quisiera, sino porque detesto al sexo masculino y eso era un "pequeño" problema...