Capitulo 27

113 8 2
                                    


Nota de la autora: Hola mis bebes ¿Cómo están? 

Se que tenia varios días que no actualizaba la historia, me disculpo, no he tenido una semana fácil, las ocupaciones no me permitieron escribir en todo este tiempo.

Pero aquí les traigo un nuevo capitulo, espero y continúen apoyando tanto la historia.

Los quiero.

-----------------------------------------------------------------------------------



Rebecca


Movía mis pies y mis manos sudaban, mi dedo medio y índice sobre el mouse de mi computadora, hacían que la pantalla bajara, mostrándome aquellas fotos que me dejaron impactada, asustada y excitada.

Debo admitir la ultima parte.

No tenia idea de que era la sumisión antes  de que Thimothe me hablara de ello y de leer el contrato. Aun tenia mis dudas, llevaba varios días indagando de poco en poco, y desde que pulsaba "Imágenes" en mi computadora, no podía evitar sentir que mis pelos se erizaran.

Esto es tan sexy y aterrador  a la vez.

Nunca me imagine en una situación como la que me encontraba, ni en mis mas locos sueños.


Cerré la laptop de golpe y cubrí mi rostro con las palmas de mis manos. -Esto es una locura. -Susurre, y lo mas insólito de todo es que aun quería continuar con todo a pesar de que las palabras de Thimothe rebotaban en mis pensamientos. 


-Rebecca, si no deseas esto, no tienes porque aceptar. -Si quería, lo quería muchísimo.

Suena tonto, pero prefería ser su sumisa a sentir que lo podía perder, o que solo soy su pasatiempo.

Y además, le demostraría a la idiota de Nathalie, que nunca tuvo razón. 

Seria su sumisa, lo iba a ser.




Silvia


No, no, no.

¿Qué era eso que sentía? No podía enamorarme de Taylor, no era posible, pero  no podía dejar de pensar en el y eso me molestaba.

La música no estaba ayudando a detener esos pensamientos, miraba el techo, recostada boca arriba sobre mi cama, y me estaba torturando a mi misma.

-Esto no me puede estar pasando a mi. -Pienso, mientras me siento sobre la cama y me quito los audífonos de los oídos. Dejo salir un largo suspiro de cansancio y el sonido de mi celular hace que mire la pantalla.

Taylor.

Mira por tu ventana.

Observe en la pantalla de bloqueo, y volvió esa sensación en mi estomago, la misma que siento cada vez que estamos solos, que lo miro a los ojos, que miro su hermosa sonrisa, la misma sensación extraña que me hace poner nerviosa y sudorosa. 

Pero no es amor, cierto ¿Cierto?

Me despoje de toda idea y me levante de mi cama, camine hasta la ventana y al abrirla, ahí estaba, parado, mirándome con esa expresión tan hermosa.

Una Sumisa MásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora