Capitulo 19

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Nota de la autora: Chicos no olviden ir a chapters y apoyar la novela "Si puedes dominarme" de mi mejor amiga y la inspiración para dos de nuestros personajes Nicauris Salcedo.

Si tienen preguntas sobre la app, pueden hacerlas en los cometarios.

 Los quiero

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Rebecca


La noticia me destruyo, solté mi celular y corrí hacia la puerta dejando a Silvia totalmente confundida. Antes de poder salir, mi prima me detuvo sosteniendo  mi mano y trato de tranquilizarme.

-Rebecca, cálmate. -Me decía mientras solo podía pensar en correr.

-¿Rebecca que paso? -Me pregunta mientras sostiene mis mejillas con ambas manos.

No podía hablar, me desplome en el suelo sentándome de rodillas, sintiéndome la peor amiga del mundo, pude ayudarlo, pude ser su soporte y no, deje que se derrumbara.

Susurre, casi sin aliento. -Jonathan esta en el hospital. -Al escuchar mis palabras Silvia se dejo caer de rodillas justo frente a mi. 

-Debemos ir al hospital. -Digo mientras me levanto del piso. Corrí hacia la planta baja, y el tío Sergio estaba en la cocina. -Tío, debemos ir al hospital. -Digo, mientras Silvia llega corriendo detrás de mi.

-¿Que paso chicas? ¿Alguna se siente mal? -Pregunta angustiado.

-No, no, no, papá. Es un amigo. -Dice Silvia, tío Sergio al mirar nuestro desespero tomo las llaves del auto y corrió detrás de nosotras.


Las lagrimas se deslizaban por mis mejillas y todo el camino hasta el hospital solo podía pensar en lo mucho que pude hacer para ayudarlo, y no lo hice, ahora había tomado esa decisión, y ni siquiera sabia si volvería a verlo y poder pedirle perdón por fallarle tanto como amiga.




La sala de espera era una tortura, pasaron quizás 20 minutos, Jonathan se había tomado un tarro de pastillas, y tuvieron que realizarle un lavado de estomago urgente y aun no teníamos noticias de el, cuando llegamos nos encontramos a su madre, la habíamos conocido anteriormente en las veces que hicimos las tareas en su casa, a mi lado se encontraba Silvia sosteniendo mi mano y el tío Sergio estaba recostado de la pared a mi otro lado.

La madre de Jonathan lloraba desconsolada, se encontraba frente a mi, me incline y con mi mano libre, sostuve la suya y le sonreí para dejarle saber que todo estaba bien a pesar de yo tampoco tener esa certeza.

Unos cuantos minutos después el doctor nos informo que la condición de Jonathan era delicada. No quería irme, no quería dejarlo solo otra vez, Le rogamos al tío Sergio que nos permitiera quedar con la madre de Jonathan y asedio, pero el también se quedaría con nosotras.

-Debo llamar a tu madre Rebecca, y a la tuya también Silvia. -Dice muy chistoso, mientras saca su teléfono y se aleja saliendo del pasillo.

-Todo esto es mi culpa.-Dice la madre de Jonathan mientras mira fijamente el piso. -Yo debí hacerle caso cuando me pedía que lo dejara, pero no, permití que lo maltratara, por miedo a quedarme sola, Dios, ¿Qué clase de madre soy? 

Una Sumisa MásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora