23. SUZANNE COLLINS.
Liam abrió la puerta del auto hacía una enorme alfombra roja. El lugar era una locura, estaba repleto de cámaras, micrófonos gente gritando, reporteros hablando con el micro en nuestra dirección...
El escenario perfecto para que mi mala suerte hiciera acto de presencia.
-¿Sabes qué? Mejor aquí te espero -señalé el interior del auto- he escuchado que la luz de las cámaras causa cáncer de piel y yo sinceramente....
Liam rodó los ojos. -¿Puedes contra una pandilla pero no puedes salir frente a las cámaras?
-Am... si, mas o menos.
Suspiró. -Jennifer Lawrence está allá dentro.
-Ya estoy afuera.
Salí del auto con valor renovado... valor que se fue al diablo cuando la primera cámara se giró hacia nosotros.
-Santa madre de las maldiciones -gruñí escudando mi cuerpo detrás del brazo de Liam.
Liam frunció el ceño. -No creo que eso sea muy ortodoxo.
-¡Luce!
-¡Luce, aquí!
-¿Cómo saben mi nombre?
Liam se encogió de hombros.
-¿Luce, es cierto que el compromiso de tu hermana ha terminado?
-¿Qué?
Liam tiró de mi brazo pero me detuve frente a la periodista.
-¿Tu hermana y Bob Heffley tuvieron algo?
-No... ¡No!
-Una fuente confidencial nos informó sobre el penoso caso de la prometida de Juan Marin, su aventura y sus problemas de salud y usted lo confirmó.
Sus hemorroides.
Maldición.
-Mi hermana tiene sano el...
-Ya nos vamos -interrumpió Liam tirando de mi hacia el frente.
-Ya fue publicado ¿cierto?
Liam no respondió... lo que indirectamente respondió mi pregunta.
Wen y mis padres iban a matarme.
Al entrar al salón enorme, me quedé maravillada. El lugar era la madre la belleza. La pista de baile era una pecera, si, el piso era de cristal y debajo de ella había agua que cambiaba de colores con la luz y peces que debían estar teniendo un severo caso de migraña. El salón se encontraba iluminado por elegantes candelabros dorados y pequeños focos que hacían alusión a las llamas en ellas. Y los dulces, oh santa madre de Buda, iban a tener que sacarme rodando de ahí.
-Ahora solo no te despegues de mi...
-Dulces.
-¿Eh?
Demasiado tarde, mi magnifica y poco coordinada persona ya estaba dirigiéndose con anhelo a la fuente de chocolate.
-¿Puedo...? -señalé las fresas con chocolate.
-Claro, es todo gratis -respondió la mujer detrás de la fuente de chocolate.
Uh, palabras equivocadas.
Mi corazón dio un vuelco.
-¿Qué estás haciendo? -preguntó Liam tomándome del brazo y obligándome a mirarlo.
-Comiendo -respondí con la boca llena.
¿No era obvio?
Liam hizo una mueca en mi dirección.
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Reina del Desastre (LR #1) *DISPONIBLE EN LIBRERÍAS*
HumorLIBRO #1 Luce Webber tiene 23 años, mala suerte y una lengua con vida propia. Liam es un importante empresario de 25 años, serio, con enfoque al trabajo y un inexistente conocimiento de la palabra "diversión". Cuando ambos se ven forzados a trabajar...