OS Male! Reader / Pedidos

"Leaving My Door Open" / Light Yagami / Death Note

Pedido por dragomago3 [Gracias por tu paciencia] [Espero y te guste]

Título

"Dejando Mi Puerta Abierta"

_-_-_-_-_

Ha pasado un tiempo desde la última vez que tu tacto se sintió cálido; seguimos sintiéndome tuyo, pero algo comienza a decirnos que tú ya no eres mío.

-¿Qué sucede?-Balbuceas mientras te acomodas sobre mi pecho.

Te observo desde arriba sin abrir la boca, queriendo sentirme afortunado de ser el único que podrá presenciar en ti esta faceta tan carente de aquel que eres fuera de estas paredes, fuera de mis brazos.

-Estoy exhausto...-Exhausto de intentar descifrar quien eres ahora; sigues conmigo, aferrado con tus brazos a los míos, pero te siento distante.

Un mensaje llega a tu teléfono y gruñes adormecido, alargando el brazo para comenzar a palpar la colcha en busca de este, que vibra sin descanso ante la oleada de escrituras. Pides mi ayuda para alcanzarlo una vez te das cuenta de que no podrás hacerlo tú sin despegarte de mi cuerpo, pero no te oigo del todo por aquel dolor agudo que comienza a apoderarse de mi pecho mientras mantengo los ojos fijos en tu pantalla.

-¿Amor?-Cuestionas al no tener mi respuesta, privándote de tu comodidad para verme la cara.

Quiero gritarte que no llames de esa forma, preguntarte qué demonios sucede, pero las palabras se atascan en mi garganta. Temo perderte, tornar todo lo que somos en un "fuimos" cargado de amargura, así que extiendo mi brazo hasta alcanzar ambos móviles y te doy el tuyo con el brazo tenso, intentando evitar que percibas los temblores.

Sueltas un jadeo de impresión cuando lees lo que te ha llegado, alzando tu mirada hacia mí con rapidez. Noto en tus ojos el desespero y el temor, sintiendo una parte de mi gritando "¡¿Qué haces?!" cuando alzo mi mano y acaricio una de tus mejillas con lentitud.

-Yo...-Balbuceas. Noto cómo te relajas mínimamente ante mi tacto, pero tus brazos continúan temblando ligeramente y eso acaba por confirmarme lo que sucede- Tengo cosas que hacer, debo irme-Me arde el pecho de celos al saber ahora que te marcharás con ella, preguntándome si todas esas veces que te despediste con excusas fue para lo mismo.

Me repito que debo de dejarte ir con el peso de mis palabras colocado en tus hombros, pero sé que quizás esas palabras me dañen más a mí entre los dos.

-Nos vemos mañana...-Me limito a decir entonces.

Sueltas el aire que has estado conteniendo en un suspiro y te levantas de la cama para comenzar a buscar tu ropa, vistiéndote con torpeza y rapidez enfrente de mí. Te observo en silencio sin moverme de la cama, sintiéndome deprimido y encelado a tal magnitud que temo dañarte si me muevo.

-Me voy ahora-Anuncias mientras te colocas frente a mí.

-Ten cuidado-Respondo, sentándome sobre la colcha.

Mordisqueas tu labio inferior un par de veces y te lanzas a los míos, besándolos con intensidad hasta que se te acaba el aliento. Entonces te alejas con rapidez y te marchas sin mirarme.

Y lucho por no romper a llorar.

(...)

Me tiemblan las manos, las palmas me sudan, siento en mi garganta un nudo y los ojos comienzan a arderme. Mi respiración se entrecorta cuanto más me acerco a tu casa y los pies se me enredan de vez en cuando.

Es tu madre quien abre la puerta una vez me he armado de coraje para llamar a ella; me recibe con cortesía y me hace pasar sin problemas, indicándome que las pantuflas que suelo usar se encuentran donde siempre.