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"Desaster" / Tanjiro Kamado / Kimetsu No Yaiba

Pedido por @Ary_Pegasus (Espero te guste [Muchas gracias por la paciencia])

Título:

"Desastre"

*Demon!Tanjiro*

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Continuaba recordando la primera vez que vio a quien sería su salvador. Él aún estaba pequeño y destruido; sus párpados, sus mejillas y su mandíbula eran resaltadas por trazos negros provocados por el hierro ardiente, dando a su cara un aspecto de advertencia, dando el aspecto de lo que era: un hijo de brujos.

-¿Quién eres?-Preguntó por veinteava vez en los últimos cinco minutos, sujetando la mano del niño con fuerza para evitar que cayera por sus constantes tropezones.

-S-Shiori-Murmuró el chico con la voz temblorosa y el rostro inundado de vergüenza.

Tomioka Giyuu confirmó que aquel nombre no era ningún consuelo para él, puesto que era el nombre que se le había dado cuando se había vuelto una insignificante pieza de mercancía.

-Shiori-Habló mientras se detenía-, significa marcar y en ti eso no va del todo-Dio una mirada de reojo a las marcas que adornaban en rostro del pálido niño y sujetó su mano con un poco más de fuerza-. Desde hoy serás Shun, rápido y talentoso... Mi tsuguko.

Y una esperanza surgió.

(...)

Era invierno. El frío era glacial y la nieve se negaba a detenerse.

-Búscalos-Ordenó su mayor, a sabiendas de que se facilitaría todo con la visión del brujo.

-Primera fase ocular...-Murmuró mientras cerraba los ojos un instante- Rastreo Sensorial-Sus ojos se tornaron negros completamente y su visión comenzó a expandirse.

Dos siluetas se llevaron su atención y pronto la imagen comenzó a aclararse, dado paso a la escena de un demonio y una chica cayendo por la montaña.

-Los encontré. Están forcejeando-Informó al notar que la escena cambiaba su rumbo.

Aceleraron el paso hasta alcanzar ambos la inhumana velocidad que poseían y desenvainaron sus katanas, listos para acabar con el demonio.

-Prepárate-Murmuró Tomioka a su tsuguko.

Shun hizo girar su katana una vez para seguido agazaparse y así acelerar un poco más.

-Mátalo-Ordenó.

Se abalanzó sobre el demonio de cabello rojizo y fijó sus ojos en los suyos; blanquecino y rojizo batallando.

-¡Esperen!

Y la hoja resplandeció un instante.

(...)

-¿Por qué?-Murmuró Shun con confusión, deteniendo la carrera a pesar de la orden de su maestro de no descansar hasta regresar a la finca.

Tomioka Giyuu lo observó desde su posición sin saber a qué se refería con aquella pregunta; ¿el que la chica había defendido a aquel demonio sin ceder? ¿el que él la defendió cuando fue noqueada? ¿el que no lo mataron?

-¿Por qué... eran diferentes?-Volvió a balbucear, sintiendo su mente sumiéndose en un caos ante lo extraño de todo aquello.

Acarició las marcas que adornaban sus mejillas y su alrededor pareció comenzar a dar vueltas. Cerró los ojos en un intento de ordenar sus pensamientos, sin embargo, aquellos feroces ojos rojizos aparecieron en su mente y acabó por caer sentado sobre la nieve, incapaz de recomponerse.