Cap 23

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Se hizo tarde, tuvimos que quedarnos en ese refugio, era mejor que quedarse en el bosque, aunque no me sentía muy bien estando adentro...decidí ver las antiguas habitaciones de los niños, habían dibujos ecuaciones e incluso recetas, era divertido verlo, llegué a la de Ray, estaba ordenas a pesar de la capa de polvo que cubría la mayor parte de las cosas, hice lo mismo que con las demás, quite un poco se polvo se la cama y vi la mesa de noche, al abrirla encontré cartas, algunas fotos y 3 paquetes de galletas de fresa, no pude evitar reírme por eso.

-de verdad te gustaban estas cosas-rei agarrandolas y guardando los paquetes en mis bolsillos, me quedé algo pensativa en si ver las cartas o ver las pocas fotos que habían-meh...de todas formas no estas aquí para reprocharme- susurre agarrando primero las fotos. Estas eran algo borrosas, a penas podía distinguir el paisaje y a algunos cuantos niños, eran como fotos rápidas que salieron mal. Segui con las cartas, o los papeles, sonreí algo nostálgica, el primer papel era una conversación corta.

-Hola, Ray!!

-Hola? ¿Por qué estamos hablando aquí?

-Por que es divertido y por que es un ensayo

-Ensayo?

-si queremos decir algo que no podemos, lo escribimos ¿no es divertido?

-es raro ¿qué cosa no podrias decir en voz alta, tonta

-Oni-chaaan~ (insertar voz de loli)

Me reí leyendo la conversación y las que siguieron, las guardé y salí de allí para dirigirme a la habitación que compartía con las chicas.

-Ya te sientes mejor?- preguntó Neida.

-si, voy a dormir así que....buenas noches- camine a una de las camas y me acomode.

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Los días pasaron y aún no encontrábamos una respuesta a como salir, varios demonios salvajes y civilizados intentaron matarnos en el camino, lamentablemente no todos habían alcanzado a llegar hasta el punto donde estábamos, se alguna forma nos habíamos hecho más indiferentes a ese tipo de cosas, aunque aún seguía siendo duro de ver.

Volvimos al lugar donde todo había comenzado, la casa Ratri, buscamos una oficina o algo que nos diera señales de que hubiera una entrada al mundo humano, era realmente frustrante y empezaba a creer que habíamos llegado por arte de magia.

-Esto ya no tiene sentido!-grito Mike, golpeando el escritorio.

-Cálmate-dijo Marcos.

-Que no lo entienden? No hay nada! Absolutamente nada!- Mike Lucía desesperado, Neida empezó a llorar por que Mike probablemente tenía razón.

-Solo tenemos que b-no pude terminar de hablar ya que Mike volvió a golpear la mesa, mirándome con molestia.

-Tu no hables, por tu culpa no pudimos quedarnos en un lugar seguro, por que ¡claro! La señorita quiere encontrarse con un chico que probablemente ya la olvidó- el se rió sarcásticamente y se acercó a mi- si tan solo te conformara con vivir una vida pacífica aquí no hubieran muerto tantos de los que quedaban, todas esas muertes fueron por tu culpa.

Lo vi intentando no llorar ¿era verdad lo que decía? Mire al suelo mientras Mike seguía quejándose, sentí que algo dolía en mi pecho, algo hacía presión allí, respire profundamente para calmarme, hasta que escuche un ligero chirrido por donde había caminado Mike.

-Mike, muévete-dije caminado hacia el lugar.

-eh?-el se veía confundido así que solo lo empujé ligeramente y toque el suelo, corte la alfombra que lo cubría, con ayuda de una navaja y encontré una pequeña trampilla.

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GRACIAS POR LEER ESTE CAPITULO

ESPERO QUE LE HAYA GUSTADO!!!!!

SobrevivirWhere stories live. Discover now