Queen's Book (One-Shots)

Un día para recordar.

Este 20 de abril de 2021 se celebraron los 29 años del maravilloso y emotivo concierto tributo a nuestro amado Freddie Mercury. Un evento sin igual que nos dejó con la tristeza de su partida, pero con la alegría de disfrutar una vez más de su legado.

El presente one-shot va dedicado a ese momento y a Freddie, porque donde quiera que esté ahora, estoy segura que debe sonreír por cada detalle que se realiza en su honor.

¡Te amamos, Fred!

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-¿De verdad? ¿Metallica? 

El grito de emoción por parte del pequeño Rufus le hace sonreír a su padre, quien tarda en despegar su mirada del niño que ahora mueve su cabeza frenéticamente al compás de la pesada música de la banda estadounidense.

Para él no era fácil volver a ver ese concierto, de hecho, esta sería la segunda vez que lo hace y esta vez está acompañado de sus hijos menores, a quienes cuida mientras su madre asiste a una consulta odontológica. Ella sabía del significado de este día, así que decidió usar ese tiempo para que él se quedara en casa y pudiera distraerse un poco con los niños, aunque no sabía que ahora estaría enfrentándose con ese estrés luego de cuatro años.

-¡Esto es increíble, papá! ¿Son así de ruidosos en vivo? - el niño pregunta sin dejar de saltar, dejando a Roger con una sonrisa divertida al verlo.

-Aturdían hasta en el camerino. - responde, fijando sus ojos en la pantalla del televisor. Por momentos se va muy lejos en sus pensamientos al recordar lo difícil que fue para él aguantar las ganas de llorar  durante ese evento, dejándole un nudo inmenso en su garganta. Pero un sonido fuerte le hace saltar.

-Ups... lo siento. - el pequeño recoge un portaretrato del suelo y lo coloca de nuevo en la mesa, para luego seguir golpeando del borde de esta con dos lápices de colores.

Roger sigue el movimiento que hace su hijo y alza una ceja al percatarse que no ha perdido el ritmo desde que inició, teniendo el atrevimiento de parar y retomar con la misma intensidad. No tenía idea que su pequeño podía hacer eso a tan corta edad. Por momentos siente que está viviendo un déjà vu y ahora se ve así mismo jugando con los cubiertos durante el almuerzo, improvisando ritmos y melodías con su voz para distraerse un rato. 

De alguna forma eso le reconforta y solo vuelve a reaccionar en el presente cuando una pequeña mano le tira del cuello de su camisa.

-¡Hey! - Roger sienta en su regazo a la bebé Tiger Lily y con un tierno gesto junta su nariz con la suya y la hace reír - ¿Te gusta más cómo se escucha esa banda?

La bebé sonríe y agita sus brazos con emoción. Roger finge indignación, provocando las risas de Rufus y de la menor de los Taylor, quien busca desesperadamente que su padre la cargue.

-¿Qué opinas, hijo? ¿Aceptamos esa traición?

El niño se sienta a su lado y se acerca a su hermana entrecerrando sus ojos, quedando como abogado acusando a la pequeña por tal osadía, pero lo que consigue es que la bebé ría y peñizque la nariz de su hermano con total diversión.

-Creo que no la aceptamos, papá. ¿Qué hacemos?

Roger estudia la propuesta y sonriendo en complicidad le susurra a Rufus sin despegar la mirada de la bebé.

-Solo hay una cosa que podemos hacer... ¡Ataque de cosquillas!

Las risas y forcejeos van y vienen. La pequeña disfruta al jugar con su padre y su hermano mayor, los cuales aprovechan la oportunidad para llenar de besos a la bebé como único medio para frenar las carcajadas incontrolables.

Desde afuera Debbie escucha el bullicio y se dirige directo a la sala de estar, sorprendiéndose al ver tan tierna escena de Roger y su hijo jugando con la consentida de la casa.

Ella se recuesta del marco de la puerta con una sonrisa enamorada en el rostro y sabe que eso es lo único que desea ver esa tarde.

-¿Llego en buen momento? - pregunta, haciendo sobresaltar a la familia.

-Mami, mi hermanita prefiere escuchar otras bandas que la de mi papi. Está acusada de traición.

-¿En serio? ¿Sabes el significado de eso? - alza una ceja buscando una explicación divertida por parte del niño, pero él solo se encoge de hombros y busca apoyo en su padre.

-No es mi culpa, él tiene razón.

La mujer niega con la cabeza y sonríe al confirmar que efectivamente vive con tres niños en casa.

Antes de acercarse desvía la mirada hacia el televisor, reconociendo de inmediato el concierto que se está transmitiendo. Ella sabe lo que significa para Roger y agradece que ahora el humor de él esté diferente a lo que esperaba para ese día.

Ha tenido que lidiar con momentos de angustia y dolor de su parte, por lo que verlo ahora sonriendo y jugando con sus hijos le hace sentir más tranquila.

Al posar de nuevo la mirada hacia su familia ya Roger la espera con una invitación en sus ojos. Esto le anima a sonreír más y asintiendo en respuesta a esa petición, la mujer deja su bolso sobre una mesa y alza los brazos contagiándose por la emoción del lugar.

-¡Aquí llegaron los refuerzos!

Ahora salen en la pantalla del televisor los tres integrantes restantes de Queen dando su último concierto juntos, mientras la familia Taylor ríe y juega en la alfombra de la sala con la absoluta certeza de que ese día lo iban a recordar también como una celebración de los pequeños y especiales momentos vividos juntos.

Sin duda, Roger tiene la seguridad de que su querido amigo Freddie lo ve sonriendo desde donde esté y eso le basta.

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