Yeosang no podía creer lo que estaba haciéndo, estar despierto a las tres de la madrugada en semana de clases era la peor idea que alguna vez llegó a tomar quería golpear a Soobin, ya era suficiente con haber aceptado registrarse en el nuevo juego el cual salía ése dichoso día.
—¿Estás seguro que el juego sale a las cuatro de la madrugada? —Preguntó tratando de acostumbrarse a la brillante luz cegadora de su laptop.
—Voy a cerciorarme en el anuncio que subieron.
Yeosang rodeó los ojos. —¿Qué dice? —Al no tener respuesta alguna frunció más el ceño despertando así su mal humor. —Soobin.
—Calculé mal la zona horaria. —Sonrió. —No te enojes.
—¡Dime a qué hora se supone que es! —El pelinegro quería tomarlo del cuello y asfixiarlo, le dejó quedarse en su casa esa noche para ir juntos a la universidad era lo monótono de su relación, pero sus planes se vieron al fondo cuando su alto y peliazul amigo le dijo que ese día el juego sería lanzado y debían mantenerse despiertos que sería rápido; error. El anuncio que vió Soobin daba horario tanto nacional como internacional, confundió las banderas y vió el horario de otro país el cual olvidó su nombre.
—El videojuego saldrá a las dos de la tarde. —Murmuró temeroso por la reacción del mayor.
—No escuché bien Choi. Repite. —Tomó su laptop la cual estaba encima de sus piernas para regresarla al escritorio, girándose hacía el contrario esperando su respuesta.
—Dos de la tarde. ¿No se hace tarde para las clases? Debería irme. —Tan pronto se levantó de la cama una mano detuvó su cometido.
—No dormí en toda la noche esperando que saliera para que me digas «dos de la tarde» ¿Sabías que tengo clases hasta las siete de la noche hoy?
—Lo olvidé, perdóname.
Yeosang apretó el agarre en su muñeca obligando así que el alto jadeara en dolor y se sentara. —Vas a lamentar haber interferido con mi sueño, lárgate, dormirás en el living. —Sin esperar una respuesta levantó a Soobin de su cama para echarlo de su dormitorio, cerrando así con cerrojo la puerta. Suspiró girándose y apoyando su espalda en ésta. —No puedo creer que siga siendo mi amigo.
Después de haber echado fuera a Soobin logró dormir dos horas su alarma había sonado disipando su tranquilo sueño, le había pedido a sus padres un baño en su dormitorio y ahora lo agradecía más que nunca no quería bajar y ver a Soobin chocar con su presencia haría que el recuerdo de hace unas horas volviera y con ello su enojo por lo que ya cambiado con mochila lista bajó hacía el living sin hacer bruscos movimientos, se acercó cuidadosamente hacía el comedor para servir su cereal con frutas cuando un sonido ajeno a él lo asustó.
—¿Nos vamos con tus padres?
—¡Soobin! —Llevó su mano hacía el pecho, sus palpitaciones eran aceleradas debido al repentino susto.
—Te veía desde la puerta de entrada actuar con sigilo, pensé que notaste alguna mirada juzgadora en ti... Pero, veo que eres un total despistado. —Afianzó más el agarre en su mochila. —¿Nos vamos o...?
—Quiero desayunar por lo menos. —Frunció el ceño. —¿Podrías dejarme alguna vez sólo?
El contrario suspiró. —Es sólo que quería llegar al mismo tiempo que Jihan. —Bajó sus manos jugando con ellas entre sí.
—Creí que no ibas en serio con ella, me equivoqué. —Sonrió. —Tienes carro adelantate, mis padres no son tu chófer por si recuerdas. —Golpeó levemente su nariz.
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network love | seongsang
FanfictionA Yeosang nunca le había interesado los juegos en línea, decía que era una total pérdida de tiempo, además de que no era bueno en algún juego en específico. Pero, por alguna extraña razón se dejó convencer por su amigo Soobin al participar de uno el...