CAPITULO 10

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Julián:

Me levanto con el sol dándome en la cara, demonios. Me levanto de la gran cama y salgo en busca de alguien, cuando estoy llegando al final del pasillo veo lo que extrañé ver durante años

Es Vicky, esta desnuda con mi camisa encima que solo le tapa hasta los muslos. Me acerco y empiezo a masajearle la parte de atrás de sus muslos. Me sorprende cuando envés de saltar, gritar, llorar, como hace años, solo me recibe, se le eriza la piel y enseguida sabe de quien se trata.

- No, aléjate de mi jodido loco del sexo-se me aleja y va hasta la cocina.

- ¿por que?

La sigo.

- por que debo hablar con Max-cuenta- necesito saber si llevo a mi hija a la escuela.

O vamos, si no ves a tu hija, Max ya se fue, es solo lógica. Al parecer es una gran madre.

Me apoyo en el marco de la puerta viendo lo que hace. Solo puedo mirarla, no sé cómo se dio anoche, pero me encanto follarla, por que si, está mujer es una salvaje en la cama. Eso por que ayer no tuvo tiempo ni lugar, pero si no es una fiera.

- ¿que tanto miras?-me pregunta haciendo un movimiento para alcanzar algo y dejándome ver el comienzo de su culo.

Me acerco rápidamente, atacó su hombro al descubierto, muerdo, lamo, saboreo, sabe tan bien. Mis manos presionan su abdomen, van bajando hasta su lindo coño y empiezo a masajear.

- Julián...no-dice

- tu no quieres parar y lo sabes.

- pero debemos-forcejea.

- ¿quieres una solución?-pregunto

- si...

Bajo más mi mano y me abro paso entre sus pliegues, hundo un dedo y comienzo a hacer movimientos, adentro, afuera, adentro, afuera. Lo tengo.

Con mi otra mano agarro el móvil y marco el número de Max. Es una tortura escuchar cómo gime en mi oído.

- hola, si, ya lleve a Nahir a la escuela. Madre desquiciada-contesta.

- hola, ¿cambio mi vos verdad?

- No idiota, tienes la misma vos de flamenco que siempre-me dice sin más

- solo te llamaba para saber si hiciste eso, tengo aquí a alguien que no para de joder con el tema-gime mi nombre. Mierda.

- trata de no matarla ¿si? No tiene actividad sexual hace años, no la rompas

- eso es lo que quiero, romperla.

- no puedes, se cuidadoso, idiota.

- ella no se queja-le acerco el móvil y le meto un segundo dedo haciendo que casi grite- ¿ves?

- qué puto asco, no necesitaba escucharlo, con que me lo digas lo creería. Esta loca por ti. Debo irme, cuida a mi bebé, idiota-cuelga.

Mejor.

Tiro el móvil por la mesada y vuelvo a mi asunto. La giro y la beso con desesperación, me abro paso en su boca, meto mi lengua y ella no duda en seguirlo uniéndolas. Con una mano aprieto ese lindo culo y con la otra no termino de penetrar.

Cuando está por alcanzar el clímax saco mis dedos

- ¿pero que?-se despierta del sueño de placer que tenia y me mira más que enojada. No, no es bueno.

- estoy comprobando si no querías que siguiera-busco con mis ojos una puerta.

- ¿como te atreves a siquiera dejarme así?-señala su húmeda entrepierna.

Deseos prohibidos (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora