El Fin

Capitulo dos

Rick echó la cabeza hacia atrás en la cara de Joe, quien se había distraído con la pantalla que tenía ante él, probablemente rompiendo la nariz del hombre y también el agarre del hombre sobre Rick.

Joe disparó su arma por reflejo, demasiado cerca del oído de Rick dejándolo desorientado por un momento. Rick se recuperó y se puso de pie tambaleándose y se abalanzó sobre el hombre mayor y le dio un puñetazo en la cara.

Rick maldijo.

Ese disparo había alterado su equilibrio, lo que le dio a Joe la oportunidad de ganar la partida.

Por el rabillo del ojo, Rick vio que Michonne estaba acostumbrada a la conmoción y le quitó el arma de la mano a su captor, pero otra con el pelo más largo y un arco se había levantado.

"¿Qué vas a hacer ahora, eh deporte?" Joe se burló con una sonrisa arrogante en su lugar.

En el fondo podía ver a Dan moviéndose sobre el chico de ojos verdes, escuchó su fuerte respiración y pequeños gemidos de dolor ...

¡Ese podría ser Carl! ¡Ese podría ser Carl! ¡Este será Carl, si no los mato!

Era como un mantra en su cabeza. Rick sintió que su cabeza se aclaraba ... como una llama cada vez más caliente, cambiando de amarillo cálido y rojo a azul helado.

Sintiéndose extrañamente tranquilo y sereno, Rick no pensó ni dudó, se lanzó hacia adelante, hundió los dientes lo más profundamente posible en la garganta de Joe y arrancó un enorme trozo. Sintiendo la sangre caliente rociándole la cara, Rick escupió la carne. Observó con frialdad y desapego cómo el hombre se ahogaba con su propia sangre.

Un silencio mortal llenó la noche, incluso Dan había dejado de gruñir. Al ver la cara manchada de sangre de Rick, Dan se había apartado abruptamente del chico. Con la polla todavía colgando, se sentó sobre su trasero, con la boca abierta.

Los otros hombres tenían expresiones similares de miedo y conmoción en sus rostros.

De repente se escuchó el zumbido familiar de flechas voladoras. El primero sacó al hombre con el arco al lado de Michonne, empujándola a la acción. Agarró su arma y mató al hombre aturdido que la había sostenido a punta de pistola.

Otra flecha arrojó al hombre del pañuelo que sujetaba a Carl.

Y luego una figura familiar emergió de la oscuridad, con la ballesta levantada; asintiendo con la cabeza a Rick.

¡Rick no podía creer lo que veía!

¡Daryl!

¡Daryl estuvo aquí! El cazador estaba vivo ... ¡gracias joder!

Otras dos flechas derribaron a otros dos hombres.

*****

Daryl maldijo violentamente. Había atrapado dos conejos y tenía la intención de darle a Harry un poco de carne. Solo para ver que cuando encontró a Joe y sus hombres tenían a Rick y Michonne a punta de pistola.

No podía ver a Carl ni a Harry, pero reconoció la atmósfera burlona y lasciva de los Claimers. Se había enfrentado a ello una y otra vez cuando los bastardos se habían movido con Harry.

Había conocido a este grupo ya Harry unos días antes, pero ya sabía de lo que eran capaces. Había hecho que su estómago se revolviera de inquietud.

Con cuidado, se acercó sigilosamente, cubriéndose en el bosque y moviéndose lo más silencioso posible. Maldita sea, todavía no podía ver a Carl ni a Harry. Había un coche que oscurecía su visión y si la dirección en la que miraban Joey y Len era una indicación de que los adolescentes estaban detrás de él. Al escuchar con atención, pudo identificar suaves sollozos que hicieron que su corazón se aprietara y la bilis subiera a su garganta.