El Fin

Capitulo treinta y cuatro

Alejandría estaba llena de emoción y por todas partes parecía haber gente. Daryl suspiró en su té, disfrutando de un pequeño momento de paz, mientras duró.

Hombre, Merle se estaría riendo a carcajadas, si pudiera ver a su hermano pequeño, sentado en una cocina ordenada, bebiendo té como una anciana.

Pero este era el buen té del alijo de Harry e incluso si el cazador no lo admitía en voz alta, sabía bastante bien, cuando no había café.

Natania tenía previsto llegar hoy con su delegación de Oceanside. El Rey y Carol ya estaban allí ... y por primera vez, para consternación de Daryl, habían llegado hace unos días. Sin embargo, el cazador no estaba molesto con su amigo o su amante. Pero Benjamín y Henry, sus hijos adoptivos, los habían acompañado y Carl, Beth y Noah les mostraron actualmente Alejandría.

Daryl no iba a mentir. Estaba más que contento de que esto mantuviera al hijo mayor de Ezekiel a una distancia segura de Harry. El joven rubio estaba aplastando con fuerza al esbelto mago, sus ojos azul celeste brillaban con un anhelo enamorado cada vez que veía a Harry. Era casi doloroso ver a la normalmente grácil pupila de Morgan, tartamudeando y tropezando cada vez que el británico de ojos verdes estaba cerca de él, quien a cambio parecía completamente obvio sobre el efecto que tenía en el pobre muchacho.

Y aunque podría convertir a Daryl en un idiota inseguro y posesivo, no podía soportar que el joven y caballeroso caballero mirara a Harry de esa manera. ¡Simplemente no podía! Todavía estaba esta vocecita en la parte posterior de su cabeza, afirmando que su pequeño mago podría encontrar una pareja mejor en un abrir y cerrar de ojos ...

Paul había entendido el estado de ánimo de su amante de inmediato, cuál podría haber sido la razón por la que el ninja había ofrecido clases de defensa personal a Benjamin y su hermano pequeño, tratando de mantenerlos ocupados y cansar al joven enamorado.

El cazador había llegado a la conclusión de que tal vez incluso su Jesús Zen habitual estaba un poco irritado por alguien tan cercano a la edad de Harry, interesado en su amante. No es que el pequeño mago le prestara tanta atención a Benjamin.

No, su atención había sido acaparada por otro hombre por completo.

Maggie y Glenn también habían llegado hace unos días, dando a los hombres de la casa Dixon-Potter-Rovia la oportunidad de volver a conectarse con su pequeño ahijado. De hecho, no fue hace tanto tiempo que habían visto al bebé, pero se sentían como siglos.

¡Y maldita sea! El pequeño cabrón ya había cambiado mucho. El cazador podría jurar que el bebé se veía totalmente diferente cuando lo vieron por última vez. Harry realmente trató de pasar cada segundo libre con el pequeño, mientras que mamá y papá Rhee disfrutaban del tiempo sin bebés que tanto necesitaban. Entonces, la sala de estar Dixon-Potter-Rovia se había convertido en algo parecido a una guardería. Dado que Judith había sido inflexible, que si su persona favorita jugaba con otro niño, ella y Gracie no serían excluidas.

Littl 'Asskicker claramente había heredado la terquedad de Rick. Seguro que tenía a su papá envuelto alrededor de su dedo meñique.

Gracias a Dios, por Michonne, o Rick y Carl ya la habrían echado a perder.

Un bebé y dos niños pequeños ahora causaban estragos en su hogar a diario.

Por el lado positivo, Snape había echado un vistazo a la creciente pandilla de niños ruidosos y se había enterrado inmediatamente en su laboratorio improvisado ...

Daryl no había visto al bastardo desde ayer por la mañana.

*

Al crujir de la puerta, Negan miró hacia la entrada, deteniéndose por un momento con sus ejercicios de lanzamiento con la pelota antiestrés que le había traído el maldito sacerdote. El padre incluso le había ofrecido enseñarle técnicas de mediación ... aparentemente para ayudarlo con el manejo de su ira y encontrar algo de paz interior ... alguna mierda como esa ...