Me desperté de madrugada, buscando con los brazos extendidos a Mildred, ella seguía a lado de mí, pero ya no estaba acostada, se encontraba sentada, en la cama.
- ¿Qué haces ahí?- pregunte con los ojos aun cerrados y voz adormilada.
- Te veo dormir- susurró.
Inevitablemente se formó una sonrisa en mi cara, misma que ahogue en la almohada a lado de mí.
- ¿Qué hora es?- pregunté
- Son las 5 am-
- Es tempranísimo Mildred, vuelve a dormir- solté algo fatigada, aún tenía mucho sueño.
- De echo ya me voy- dijo parándose de la cama.
- ¿Por qué?- quite la almohada de mi cara y por fin la mire.
- Alice mírame, mi uniforme esta terriblemente arrugado, dormí con maquillaje, y ahora debo asearme para regresar más tarde-
Analice su apariencia y si, tenía algo de razón, su maquillaje estaba algo corrido, gracias al contacto de las sabanas, su cabello que siempre permanencia perfectamente peinado estaba algo alborotado, algunos cabellos rebeldes salían por encima de su cofia, y en efecto su uniforme estaba totalmente arrugado.
Pese a eso jamás la había visto tan bonita; la tan propia enfermera Ratched siempre tenía todo bajo control, eso incluía su apariencia que siempre era impecable, todos la veían siempre deslumbrante, pero yo, yo estaba conociendo el otro lado de Mildred el lado que se permitía no ser "perfecta" todo el tiempo.
Parecerá tonto, pero para mi no lo era en absoluto, sentía que ella me tenía la confianza suficiente, como para mostrarme su lado menos "lindo", ese privilegio no lo tenía nadie más que yo, ella me hacía sentir especial sin siquiera intentarlo.
- Te vez hermosa- le dije con una sonrisa de idiota.
- Los demás pacientes no pensaran eso- sonrió también.
- ¡Que se jodan los demás pacientes!- conteste.
- ¡Ese vocabulario señorita Peters!- me miro una cara falsa de indignación.
- Solo digo la verdad-
- No son ni las 7 de la mañana, y ya me estás haciendo reír-
¡Oh, Mildred! si supieras que tu risa es mi sonido favorito.
- Tienes una risa muy linda, me alegra que sea uno de los primero sonidos que escucho al despertar-
Me gustaría escucharlo toda la vida...
- Levantarte tan temprano hace que no carbures bien lo que vas a decir- soltó irónica.
- Tal vez tienes razón- suspiré resignada.
- Vuelve a dormir cariño, aún es temprano- se acerco a mi, y me arropo.
- ¿Te puedo confesar algo?- pregunté con algo de pena.
- Sabes que si- su mirada estaba en su uniforme y con sus manos hacia lo posible para eliminar las pequeñas arrugas que había en este.
- Adoró cuando me llamas "Cariño"-
- Lo sé- Volteó su mirada hacia mi.
- ¿Como lo sabes?- pregunté sorprendida.
- Me dijiste muchas cosas la noche después de tu operación-
Abrí los ojos, ¿Qué tanto se me abra escapado esa noche?
- ¿Por que no lo mencionaste después?-
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Enfermera Ratched.
RomancePor qué cuando tus ojos se encontraron con los míos, sentí el alivio placero del alma. ¿Me dejaría entrar a su corazón enfermera Ratched? ¿Podría curar yo su dolor? ¿O este me consumiría a mi también?
