Capítulo 45

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Olivia

Son las tres de la madrugada y escucho la puerta de mi habitación abrirse despacio, sigilosamente, tras eso se escuchan unos pasos. Sé perfectamente que es él. Gael se mete conmigo y Golfo en la cama que también está aquí desde que me fui a dormir. Gael me abraza rodeandome la cintura y atrayendome hacia él hasta que estamos completamente pegados.

—No deberias estar aquí.— Le recuerdo por la conversación que hemos tenido antes con nuestros padres en la que he prometido que ninguno iria al cuarto del otro por la noche.
—Lo sé pero solo un poco, luego me iré te lo prometo.—

Es evidente que me encanta que haga esto casi todas las noches y ojalá no tuviera que irse pero es lo que hay.

Pasadas las cinco Gael ya se ha ido y yo y Golfo nos quedamos solos en la cama, intento dormir un poco más, cosa que me cuesta si él no está.

* * *

Me despierto, son las once de la mañana, cuando salgo de mi habitación no veo a nadie, veo un mensaje de mi padre que dice que Rayna y él han salido a comprar pero no se donde estará Gael. Llego a la cocina para hacerme eo desayuno y veo una notita que pone.

"He salido a dar una
vuelta con la moto.

Gael."

Supongo que estoy sola en casa así que desayuno y después de eso me visto, me pongo unos shorts de chándal y un top y hago lo que mas me gusta cuando estoy sola en casa, poner la música a todo volumen y bailar, no la pongo muy alta claro está porque sino los vecinos me matarían.

Le doy a aleatorio y me sale la mítica de "New rules" de Dua Lipa, adoro esta canción y me pongo a bailarla como si no hubiera un mañana.

Al rato llegan Rayna y mi padre que me pillan en medio de mi concierto casero pero hago un paron para ayudarles a guardar la compra.

Son la una pasadas y Gael todavía no ha vuelto, Rayna le manda mil mensajes y le llama mil veces pero no responde a ninguno ni ninguna. Empiezo a preocuparme porque Gael suele responder siempre, pero está vez no lo está haciendo y es algo raro en él.

Llegan las dos y el móvil de Rayna empieza a sonar, contesta y lo pone en manos libres para que todos podamos escuchar.

—¿Diga?— Pregunta Rayna.
—Buenas tardes, ¿es usted la madre de Gael?— Pregunta la voz desconocida al otro lado de la línea. Al instante pienso 《que raro Gael no es de meterse en líos》.
—Si.— Contesta Rayna. —¿Es que acaso se ha metido en algún lío?— Pregunta. Ha pensado lo mismo que yo.
—Me temo que no señora. Verá... eem— Me entran ganas de decirle digalo ya. —Su hijo ha tenido un accidente y está en el hospital, en la UCI.—

Nos miramos todos impactados ante la información.

—Voy para allá.— Dice Rayna y cuelga.
Tras colgar se hecha a llorar y pide a mi padre que la lleve al hospital, claro está yo también voy. Al igual que Rayna me echo a llorar al asimilar lo que ese hombre nos ha dicho. Golfo al verme triste se acurruca en mi pierna sin saber muy bien que pasa, le cojo en brazos.

Salimos de casa y nos metemos en el coche, durante el trayecto no puedo parar de llorar, Leyda me envia un mensaje para ver si quiero salir esta tarde con ella, le explico lo que ha pasado entre lagrimas, casi no veo la pantalla de mi móvil. Leyda me envia animos y me desea que se ponga bien.

Cuando llegamos Rayna pregunta en recepción por la habitación donde tienen a Gael y vamos directos quiero entrar pero sé que no debo es algo que solo puede hacer Rayna ahora mismo ya que es su madre. Me quedo fuera con mi padre esperando y tras un rato Rayna sale llorando más que antes y nos informa de que está en coma y que los médicos le han dicho que lo ven muy mal.

—No. No puede ser. Eso es imposible algo podrán hacer.—
—Me temo que no cariño, está muy mal.— Me informa Rayna.

Me ecjo a llorar de nuevo y Rayna y mi padre se unen a mí.

Estamos el resto de la tarde en el hospital hasta que llegan las ocho y mi padre y Rayna deciden que lo mejor será que Rayna se quedé, le da igual si tiene que quedarse fuera. Mi padre insiste un par de veces en quedarse con ella pero Rayna le dice que no hace falta y nos volvemos a casa. Nos vamos cada uno a su cuarto sin cenar ya que ahora mismo no nos apetece en absoluto.

Estoy a punto de entrar en mi cuarto pero finalmente decido entrar en el de Gael. Me siento a los pies de su cama y observo su habitación con lágrimas en los ojos, me levanto y voy hacia el escritorio donde encuentro una foto de los dos escondida y su libreta, me dijo que si algún día moría podría mirarla pero de momento no. Gael se va a recuperar así que ni la abro.

Voy hacia la cama, levanto las sabanas y me meto en su cama, huele a él, abrazo una almhoada que tiene él en la cama y me quedo dormida sin casi darme cuenta.

P.D. Para siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora