La Elegida [d.malfoy] - FINALIZADA

Capítulo 2

Evangeline Wright

Hoy era el día. Hoy me dirigiría a Inglaterra. Estaba en la estación Edimburgo-Waverley. De aquí partiría mi tren hacia mi destino.

—Los extrañaré —decía mientras abrazaba a mis padres.

—Y nosotros a ti, por favor llámanos cada que puedas.

—De preferencia todos los días —añadió mi padre.

—No los llamaré todos los días, no tengo 5 años.

—Pero tienes 17, estás pequeña para viajar tú sola a otro país —dijo mi madre.

—Les llamaré en cuanto llegue.

Escuché un silbato y una campana, lo cual significaba que el tren saldría de la estación, volví a abrazar a mis papás y subí con mis maletas.

Me senté en el lugar que decía el boleto y me dispuse a escuchar música, traía varios casetes ya que sería un largo viaje.

Draco Malfoy

Hace unos días nos informaron que sería una chica la que se quedaría con nosotros, me enfureció demasiado el pensar que una adolescente sería la responsable de salvarnos de pasar nuestra eternidad encerrados, no se hace ni responsable de ella misma y el Ministerio ya quiere que se haga responsable de toda una familia.

Los encargados de recoger a la muggle nos avisaron que venían en camino y llegarían en unos 5 minutos, como "buenos anfitriones" salimos de la casa y los tres esperamos en la puerta a que llegara.

—Recuerden, sean lo más educados y amables que puedan —comentaba mi madre mientras nuevamente acomodaba el cuello de mi traje.

—Es una muggle, Cissy, no esperes mucho de mí.

—Lucius, es nuestra salida de Azkaban, de verdad trata de comportarte, sé que puedes amor.

Mientras ellos se besaban pude ver como un carro iba entrando a la mansión.

—Llegó. —les avisé.

El auto fue parando poco a poco, primero salieron los del Ministerio, eran dos hombres, uno de ellos se dirigió a la parte de atrás y sacó un equipaje, el otro abrió la puerta de los asientos traseros.

Pude ver como una chica de cabello negro salía, venía vestida muy bien, muy "presentable" como solía decir mi padre, no era muy alta, supuse que me llegaría a los hombros, traía las uñas de las manos pintadas de negro, usualmente no me gustaba como se veía una chica con uñas pintadas pero ella no se veía tan mal.

Mis padres y yo estábamos perfectamente derechos viéndola, parecía estar realmente asombrada por la mansión... Pfff, muggles.

Cuando estuvo parada exactamente enfrente de nosotros, mi madre fue la primera que habló y la única que se atrevió a decir algo.

—Hola querida, bienvenida —se acercó más a ella y la abrazó.

Mi padre y yo nos volteamos a ver con cara de confusión.

—Me presento, soy Narcissa Malfoy, puedes llamarme Narcissa o Cissy y ellos... Ellos son Lucius mi marido —señaló a mi padre.

—Mucho gusto, señorita —él inclinó un poco la cabeza como forma de saludo.

—Y él es mi hijo Draco.

—Un gusto —le extendí mi mano para que la estrechara y lo hizo.

—El gusto es mío, yo soy Evangeline Wright y les quiero agradecer por permitirme quedarme en su casa, es una gran oportunidad estar aquí.

Los tres le sonreímos, mi madre con más ganas por supuesto.

Lo peor de todo era que el Ministerio se llevó a los elfos domésticos, según eso los muggles no estaban acostumbrados a verlos, por lo que tendríamos que hacer nosotros mismos todo.

Mi madre me pidió que llevara su equipaje a la habitación en la que se quedaría y claramente no podía negarme.

Merlín, has que terminé este año.