Evangeline Wright
No estaba muy segura si cuando lo vi se me congeló la sangre o hirvió, era una sorpresa verlo pero no una bonita.—Evangeline, que tal —dijo Ben, interrumpiendo la "discusión" que tenían Margot y Tom haciendo que ellos también lo miraran.
—Ben. —dije a secas.
—Que sorpresa verte aquí —miraba hacia abajo ya que también era más alto que yo, parecía que todo mundo lo era.
—Sabías que estaba en el programa de intercambio.
—Sí, pero después ya no supe que pasó con eso, me alegra que estés aquí —utilizaba un tono antipático, si alguien no lo empleaba en forma de broma, podía llegar a ser tan irritante, Ben era de los que no lo usaban de broma.
—Tengo que ir a clases, vamos chicos —me dirigí a las dos personas a lado de mí que venían acompañándome desde la entrada.
Pasé a un lado de él y continué mi camino a mi aula correspondiente.
Los tres tomamos asiento y Tom fue quien rompió el silencio que se había generado desde el pasillo.
—¿Quién era ese? No me gustó como hablaba.
—Es Ben.
—¿Y qué hace o qué?
—Es mi ex.
Margot y Tom se quedaron callados por un momento.
—Vaya, ya entiendo porque se sentía la tensión —volvió a hablar Tom.
—¿Por qué terminaron? —preguntó Margot— Si no te molesta contarnos.
—Nos conocimos cuando entramos a preparatoria, a mi mejor amiga le gustaba su mejor amigo por lo que siempre que ellos estaban juntos, Ben y yo también lo estábamos. Las personas me decían que no tuviera nada con él, que era un egocéntrico, presumido y no sé qué tantas cosas, claro que una a veces puede ser estúpida y no hacer caso a esas cosas, así que le di una oportunidad. Íbamos a cumplir 9 meses cuando me di cuenta de que me estaba siendo infiel, él me juró que no pasó nada pero eran demasiadas las pruebas que decían lo contrario. En su tiempo realmente me dolió, pero poco a poco pude superarlo. Creía que teníamos algo especial, que el enamoramiento era mutuo.
—Lo sentimos Evangeline.
—Sí, no te merece.
Reí para mí misma— Gracias chicos, lastimosamente el universo me castigó haciendo que viniera de intercambio al mismo sitio que yo. Además había algo medio raro en su familia
—¿A qué te refieres? —añadió Margot.
—No lo sé exactamente, solo que siempre sospeché algo de ellos, se comportaban un poco extraños, en especial su hermano menor.
*Margot me sugirió un lugar para comprar el teléfono que buscaba, así que saliendo de clases me dirigí a él.
Llegando a la mansión, Narcissa y el Señor Malfoy estaban en el jardín tomando el té, ella me invitó a que me les uniera, necesitaba contactarme con mis padres por lo que tuve que rechazar su propuesta.
Subí a la habitación y lo más rápido que pude conecté a la corriente el aparato, marqué el número de casa y en unos 10 segundos mamá se anunció.
—¡Mamá!
—¡Evangeline! ¿Cómo has estado hija?
—Muy bien, todo es increíble por acá, muy bonito, tal como lo imaginé, la escuela es muy grande, hice una especie de dos amigos.
—¿Cómo que una especie de amigos?
—Sí, lo que pasa es que los acabo de conocer, así que no sé qué somos todavía.
—Me alegra escuchar eso hija, tu padre no está, ¿Puedes marcarle en un rato?
—Sí, más tarde vuelvo a marcar. Nos vemos, mamá. Te amo.
—También yo, adiós.
Draco Malfoy
Regresaba de la cocina mientras me dirigía a mi habitación, con mi jugo de manzana en manos, al pasar por la habitación en donde estaba Evangeline viendo que la puerta estaba emparejada, me asomé para ver si estaba ahí, siempre cerraba completamente.Pude ver como estaba acostada boca abajo con las piernas tambaleándolas, hablando por... ¿Cómo me contó Blaise que se llamaba eso?
Teléfono.
Ese aparato que usan los muggles para hablar a largas distancias. De las pocas cosas que se me quedaron grabadas sobre ellos.
Mi curiosidad despertó por lo que me quedé tratando de escuchar lo que decía.
—Todo bien Aila, solo que... —dijo ella— Me siento extraña aquí, en esta casa —susurró.
Aguardó unos segundos y después de que supuse que la otra persona le respondió, siguió hablando— No sé, no me han tratado mal pero no los veo muy cómodos de tenerme aquí, creo que no les caigo bien... Me siento... —por su voz sabía que lloraría— Me siento mal, sola, no tengo con quien conversar aquí, el hijo me trata mal, me habla feo, no le hecho nada, el señor es medio extraño y en ocasiones me mira con asco y la señora siento que solo es amable por obligación, lo puedo notar en su tono de voz. Yo solo-solo quiero irme de aquí, iré a ver si puedo cambiarme de casa, tal vez haya algún sitio solo, ¿No crees?...
Me aparté de la puerta y retomé mi camino, por alguna razón me sentí mal y culpable, ya no era mortifago, pero de alguna forma volví a hacerle daño a una muggle. Ella tenía razón, no nos había hecho nada a mis padres y a mí, al contario, era nuestra salvación y nosotros solo la tratábamos como escoria.
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La Elegida [d.malfoy] - FINALIZADA
FanfictionTerminó la guerra, todo el miedo se esfumó, todos los relacionados a Voldemort han ido a Azkaban, excepto una familia. Los Malfoy. La familia que estuvo más involucrada con el Señor Tenebroso, todos sus miembros de su lado. ¿Por qué se salvarán? ¿Po...