La furia de mi Halcón

Parte 15: Viejas amistades

"- La primera vez me escapé del internado pero me cogieron al llegar a la carretera, mi intención era hacer autostop y que alguien me llevase a casa de Alice. "

Rebeca me estaba contando su experiencia en el internado. La verdad es que siempre tenía muchas aventuras que contarme. Y siempre estaba ahí cuando la necesitaba.

Había pasado una semana desde que sucedió todo aquello de la fiesta. Hubiese sido peor si Rebeca no hubiese estado conmigo, pero lo cierto era que a mi madre le preocupaba que Rebeca hubiese vuelto.

"-Mamá puedes estar tranquila de verdad, Rebeca ya no es la que era. Ha recibido mucha ayuda de médicos y psicólogos estos meses en el internado, ya no se mete en líos." - le dije a mi madre para intentar tranquilizarla.

- Está bien Cindy, tendré que confiar en ti. Aun así quiero que tengas mucho cuidado con ella y con sus amigas, de verdad te lo pido." - me dijo ella.

Aunque Rebeca fuese la lider del grupo, yo sabía que ella no era el problema, sino Alice y Stephany, sus dos fieles seguidoras. Esas dos chicas no eran trigo limpio, y tampoco eran buena influencia para Rebeca. Esta tarde habíamos quedado con ellas, yo no quería verlas porque cuando estuve en el hospital no vinieron a visitarme, pero no me quedaba otra. No quería quedarme sola.

Elegí un outfit chic y casual. Llevaba una camiseta blanca, una falda vaquera y una cardigan rosa pastel. Sabía que Alice y Stephany iban a alucinar. Cuando estaba en su grupo siempre llevaba mi cazadora de cuero negra y una sombra de ojos negra también. Había cambiado bastante, a decir verdad. Pero sabía que esa imagen de chica mala no me convenía.

- Bueno chicas, ¿cual es el plan? - preguntó Alice.

Habíamos quedado a las cinco de la tarde. Sentí un poco de nervios al verlas. La última vez que ví a Alice y Stefany fue en aquella pelea.

Decidimos hacer algo tranquilo, fuimos a casa de Rebeca. Les conté todo lo que había pasado con Eli, Adriana y las chicas.

- Yo conozco a ese tal Eli, el americano, ¿verdad? una amiga mía se enrolló con él hace dos semanas, pero el muy cabrón no volvió a llamarla. - nos dijo Stephany.

- Si, es él seguro. Pero como te pudieron hacer eso, Cindy? Esa Adriana se merece que le demos una buena paliza, ¿verdad? - me dijo Alice.

- No chicas, por favor. No quiero nada de peleas. - les dije preocupada.

- Vamos Cindy, tú no eras así. Antes molabas más, eras de lo mas violenta. ¿Te acuerdas cómo le agarraste del pelo a esa chica porque se te coló en aquella fiesta? Fue brutal. - Se rió Alice.

Lo cierto es que sí. Con ellas descubrí una parte de mi que no sabía que tenía, y cuando estaba de mal humor podía llegar a tener muy mal caracter.

- Cindy, te has vuelto de lo mas blanda. Creo que necesitas un cambio de look. Rebeca, ¿nos prestas tu coche? - Preguntó Alice.

Ubicación: Centro Comercial Magna Plaza.

-Chicas, no me si este look me favorece. No me siento cómoda. - les confesé un tanto preocupada.

Este era el outfit que llevaba antes:

Y este es el que llevaba ahora:

- ¿Pero qué dices? Estás cañón Cindy, si te ve Eli alucina en colores. Y esa tal Adriana te tendría muchísimo miedo. - me dijo Rebeca.

Tenía razón en el fondo. Me veía estupenda. Era un lado oculto de mi que me encantaba. Me hacía sentirme enpoderada y tener mucha confianza en mi misma.
- Está bien, me llevo todo el conjunto. - les dije.

Todas se alegraron muchísimo. ¿Volvía a ser la Cindy de antes? Se acabó el parecer una niña buena. Se van a enterar todos de quien soy ahora.