"When you're ready." - ScarletWidow; [g!p]

Capítulo 7

Habían pasado ya 3 meses  desde aquella primera clase con Charles. Debo confesar que realmente he podido controlar mejor lo que me sucede, solo tuve problemas unas dos o tres veces más, pero del resto he sido capaz de impedirlo. Estar con Pietro y Kitty era agradable, nos la pasábamos juntas todo el día debido a que Pietro salía. La mayor parte del tiempo Polaris se nos unía e incluso me acompañaban a las sesiones con Charles.

Era difícil adaptarme a una nueva vida. Con todo el tiempo libre que tenía decidí salir a comer con Aubrey y me permití hacerle preguntas que en ningún momento se negó a contestar. Me explico cómo terminamos y quién había tenido la culpa.

-Bien, no quiero que me odies ahora y de nuevo - Decía con el menú de aquel restaurante en  mano - Fui yo, me acosté con alguien más, tú me querías matar, terminamos, me odiaste unos meses y tiempo después cuando volvimos a hablar ya estabas colada por Romanoff y todo eso - Ella tenía una sonrisa en el rostro, como si estuviese contando su película favorita con cierta nostalgia.
-¿Por qué lo hiciste?, ¿Ya no me querías? - Le pregunté en un tono nervioso. No buscaba volver a estar con Aubrey pues entendía la situación pero no me podía culpar a mi misma, en mi cabeza hace tan solo un mes estaba con ella, siendo feliz, queriéndonos. Obviamente tenía dudas y conocer las respuestas me rompía en mil.

-Estaba borracha, Wanda - Me respondió sería, le costaba hablar de ello - No justifica nada, yo se,pero estaba borracha y la realidad es que no recuerdo el 80% de eso.
-¿Qué hice cuando me enteré? - Le pregunté tratando de romper la tensión.
-Mmm - Pensó un poco su respuesta - Rompiste el vidrio de mi auto - soltó una risa - y me gritaste muchas cosas feas - Puso cara de niña regañada.

Comencé a reír debido a eso. Tan solo  imaginar la escena me sorprendió ,aunque claro, conociéndome a mi misma no dudaba haber hecho algo así.
Nuestro desayuno llegó, y sin entender cómo o porqué, el olor de mi desayuno me provocó de una manera inexplicable. Tenía ganas de vomitar y aquella comida no estaba ayudando. La mesera simplemente nos miró apenada. Aubrey le dijo algo que no pude escuchar mucho y la mesera se retiró de ahí.

-Wanda,¿Qué pasa? - Aubrey rápidamente se levantó y se acercó a asegurarse de que estuviera bien - Podemos ir al hospital, aquí queda uno cerca. - Decía bastante preocupada.
-No,no,no - Le respondí tratando de recomponerme  - Está bien, solo, es por todo esto de la memoria a veces me sucede. No hay que preocuparnos - Le sonreí.

No pude comer ese desayuno porque el olor estaba acabando conmigo, no entendía porque, siempre adore los chilaquiles. Aubrey continuó preocupada por mi pero finalmente logré tranquilizarla. Aquel día me contó más detalles acerca de tiempos y momentos que ya no podía recordar, eso me hizo bien, en las recientes citas que había tenido con la doctora Helen y Charles constantemente decían que aunque me asustara debía ir en busca de mis recuerdos y trabajar por ellos, solo asi podria ayudarme a mi misma.
Por la noche decidí permanecer en mi habitación y cenar a solas.
Conecte mi teléfono a la computadora  que Kitty me había dado semanas antes. Llevaba bastante tiempo evitando ese momento, la realidad era que me asustaba demasiado descubrir quién era en verdad, me asustaba descubrir que mi vida era demasiado buena y que quizás jamás podría recuperar aquello.

Lo primero que hice fue abrir de nuevo aquella carpeta en la que encontré miles de momentos míos con Natasha inmortalizados en fotografías. Lo había intentado antes con mi padre Erik y funcionó, así que intentaría el mismo método para recordar a Natasha.
Le di a reproducir a un video aleatorio de nosotras, en el video ella estaba corriendo y jugando con los perros en el campo libre de nuestra casa  mientras yo grababa sentada desde la puerta. Ella reía y molestaba a los perros, mi risa se podía escuchar también. Nat comenzó acercarse hacia la cámara con Baymax en manos, una vez que lo colocó como si de un cachorro se tratase ella comenzó a reír de nuevo porque el perro estaba enorme ; "Y pensar que este energúmeno me ayudó a conquistarte." después de decir eso me guiño el ojo, "No me pude resistir." se escuchó mi voz.
Lo mire un par de veces más, intentaba entender a qué se refería Nat, ¿Quién de las dos habrá dado el primer paso? Una vez acostada intente concentrarme en ese recuerdo en específico, me apoyé en los consejos de Charles y después de unos cansados 10 minutos, sentí una luz cegadora en mis ojos, era casi como un flashback, como soñar despierta.