Capítulo 10 (+18)

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Pov Wanda

Después de que Nat pusiera el coche en marcha no recuerdo el momento en el que me quede dormida, solo se que desperté y ya no estábamos en Nueva York, por el contrario, estábamos bastante retiradas de la ciudad, el coche estaba aparcado y Nat se encontraba acostada en su asiento reclinado.

El sol apenas comenzaba a salir y me dejaba apreciar perfectamente el rostro adormecido de Nat, y vaya que era hermosa, el detalle era que tenía el rostro lleno de moretones y puñetazos, reí un poco debido a eso porque Nat siempre estaba de esa manera.

En un intento de intentar recorrer mi asiento hice más ruido del que esperaba y Nat se levantó bastante asustada.

Una vez sentada en su asiento giró para observarme y su rostro pasó de sorpresa a tranquilidad en segundos, ¿Cómo se supone que no me enamorara de esa manera?

-Hey, puedes seguir descansando si lo necesitas, ya me siento mejor - Yo me encontraba recostada de lado en mi asiento, de tal manera que podía observarla sin ningún problema.

Me dio una sonrisa, acto seguido, comenzó a estirarse mientras soltaba pequeños gemidos debido a los golpes que tenía. Aquella camisa se levantó de más dejando ver la herida que tenía en el abdomen, también se podía observar lo definido que estaba pero no era lo importante.

-Tenemos que continuar porque aún no estamos seguras - Hablo y después comenzó a encender el automóvil.

Con una mano la tome del pecho y la empuje para que se recostara en su asiento de nuevo.

-Esa herida está terriblemente preocupante, Natasha - Le recrimine mientras me colocaba de rodillas para observar mejor. Levante su camisa sin ningún pudor y comencé a cerrar aquel corte o lo que sea que fuera con ayuda de mis poderes.

Ella solo me miraba con una sonrisa mientras se quejaba un poco , en cierto momento llevo una mano a mi cintura y aquello me puso más nerviosa de la cuenta, su toque siempre me ponía mal.

-Gracias, Wanda - Me habló fijamente a los ojos una vez que termine de cerrar su herida y bueno, nadie habla de lo intimidante que Natasha Romanoff es todo el tiempo.

No dije nada, solo me acomode de nuevo en mi asiento, ella puso el coche en marcha.

-Necesito cargar pronto, podríamos bajar a comer algo, ¿Estás hambrienta? - Pregunto rompiendo el hielo.

-Muchísimo - Respondí riendo.

Ella me devolvió la sonrisa y minutos después de cargar gasolina aparcamos en un lugar de comida, al entrar, teníamos todas las miradas en nosotras, es decir, la cara de Nat parecía un cuadro de Picasso así que no pasábamos precisamente desapercibidas. Todo iba normal, hablábamos un poco, reíamos de bromas, a pesar de la situación en general, estábamos bien con nuestra compañía. El problema comenzó cuando la camarera llegó para tomarnos la orden.

-Buen día, ¿Ya han decidido? - Una chica rubia algo simpática se acercó a tomarnos la orden.

-Quiero una de estas - le dije apuntando a un paquete de hamburguesa bastante atractivo.

Ella asintió en mi dirección y una vez que termino de apuntar se giró hacia Nat.

-¿Tu ya has decidido que ordenaras? - Le mesera le pregunto a Nat mientras  la escaneaba de arriba a bajo. - podemos ofrecerte cualquier cosa que desees - la tipa continuaba hablando en ese tono y comencé a enojarme.

¿Qué carajos le sucedía con mi Nat? Era cierto que con esos Jeans y aquella chamarra negra no podías evitar derretirte ante ella, pero eso era problema solo mío no de nadie más.

"When you're ready." -  ScarletWidow;  [g!p]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora