El amor llega cuando menos te lo esperas, pero si cuando más lo necesitas.
Camila necesitaba una señal y el destino se la presento.
Lauren aprenderá que la vida tiene otros caminos para ella que no siempre son lo que imagino.
Un encuentro casual...
El día de ayer fui por Emma y Leni para traerlas a la ciudad. Me quedé en mi antigua casa hasta que Leni se fue a dormir, le expliqué que me tendría que ir por algunos días, pero me estaría comunicando todos los días con ella por video llamada.
Son las siete de la mañana, nos estamos dirigiendo a casa de Camila para después ir tomar el jet y poder dirigirnos a Inglaterra.
Al llegar a casa de mi hermoso sol ya tiene sus maletas listas a un lado de la puerta.
—Hola hermosa.—
Me saluda con un beso en los labios.
—Hola Camz, ¿Cómo estás?—
—Muy emocionada y lista, ya quiero pasar estos días contigo.—
Dice mientras acaricia mi rostro.
—Cariño... Es posible que algunas veces me encuentre ocupada, pero si no quieres estar esperándome puedes conocer la ciudad con los chicos.—
—Ya lo sabremos estando ahí, pero aún así agradezco la oferta.—
Al llegar a la pista el jet ya nos está esperando.
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Este es uno de mis favoritos, mucho más que uno que ya habíamos utilizado para regresar de París.
—¿Lista, hermosa?—
Pregunto mientras sostengo la mano de Camila.
—Muy lista.—
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Al entrar nos encontramos con Gina, mi asistente y dos administrativos que se estarán haciendo cargo de la naviera.
—Buenos días señoras.—
Saluda mi asistente con una pequeña sonrisa e inclina la cabeza.
