Cαsh, Cαsh, Cαsh

⛧ 𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟮 ⛧

Estaba en mi cuarto cantando una canción mientras terminaba de acomodar las ultimas cosas, escuche como la puerta se abrió y vi a un Aleix con un pote de helado y dos cucharas, me miro apenado y le sonreí indicándole que puede pasar.

Se acostó sobre mi cama, boca abajo dejando el pote en medio, para que podamos comer ambos, me senté como indio y tome la cuchara que él me ofrecía. Ninguno hablaba, solo se escuchaban los arboles de afuera y los pájaros.

─ ¿Cómo te trata vivir con Aegan y Adrik? ─ pregunto

tome una bocanada de aire antes de hablar, y abrí mis ojos

─ Bueno.. Aegan me rompió la nariz y Adrik.. meh me es indiferente, siempre esta leyendo o fumando, hasta ahora me parece como tu y Owen ─ hable mirándolo mientras tomaba un poco más de helado ─ ¿Por que preguntas?

─ ¿¡Aegan rompió tu nariz?! ─ pregunto casi en un grito, yo solo alce mi vista mirándolo ─ no solo para saber, sabes.. pueden ser medios idiotas o tercos al querer darte tu espacio ─ hablo él yo asentí

Le sonreí ─ Cualquier cosa que me suceda, hablare contigo

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Por fin había terminado de acomodar mis cosas, abrí mi armario para buscar la ropa que me pondría, opte por un jean holgado y una camisa corta de mangas blanca, mi ropa interior una lencería negra.

Estaba por salir de mi habitación cuando la puerta se abrió, por suerte me aparte antes de que me rompan la nariz. Allí vi a Aegan mirándome, encarne una ceja y me cruce de brazos.

─ ¿Puedo ayudarte en algo? ─ pregunte, él paso como si fuese su habitación empujándome hacia un costado

─ ¿Te comiste mi helado? ─ pregunto sentándose en la cama y apoyando su espalda a la pared

─ No

─ No me mientas, vi dos cucharas en la pileta de la cocina y un pote de helado en el tacho de la basura.. y casualmente mi helado no esta

─ Por si no sabias, hay tres personas más en este apartamento ─ hable cruzándome de brazos ─ y ya te dije que yo no fui

─ Por favor.. Adrik no come helado, Owen no esta y Aleix tampoco ─ se levanto acercándose a mi con paso amenazante ─ no te hare nada, confiesa

Suspire y alce mi vista para verlo ─ Bien...no, no fui yo..

─ Mientes y hasta que no me digas la verdad me quedare aquí ─ volvió a sentarse en la cama, esta vez sobre mi ropa.

─ Llegara un momento en el que te cansarás.. y te iras. ─ hable tomando una toalla ─ ahora si me dejas me iré a duchar

Camine hacia el baño, cerré la puerta y comencé a quitarme la ropa para dejarla en el tacho de la ropa sucia, abrí la ducha, deje que el agua caiga por mi nuca, recorriendo cada parte de mi cuerpo, y luego de unos segundos salí envuelta en la toalla.

Entre en mi cuarto, y sorprendentemente Aegan seguía ahí, viendo unos cuadros. Lo ignore y comencé a buscar mi ropa, al ver que no estaba lo mire.

─ Dame mi ropa, por favor..

─ ¿De que estas hablando? ─ se hizo el desentendido

Suspire y tome mi ropa interior, salí de mi cuarto hacia el baño, me seque y coloque la ropa interior, deje la toalla y camine así hacia mi cuarto nuevamente. Me importaba poco y nada de que Aegan estuviera allí.

𝗔𝗲𝗴𝗮𝗻 𝗖𝗮𝘀𝗵

Si, le escondí la ropa ¿Y eso? ella se comió mi helado y hasta que no me diga la verdad no le daré su ropa. Seguí mirando el cuadro que tenia en mis manos, era ella y Owen de pequeños, cuando lo deje apareció en ropa interior por la habitación.

Caminaba despreocupada de la vida, como si no estuviera nadie en la habitación o como si fuese una de sus amigas. Decidí recorrerla con la vista, su cuerpo parecía estar tallado a mano, parecía una de esas modelos, cuando se agacho para juntar algo mi vista solo se intensificó en un punto x de la habitación, no quería hacerla sentir más incomoda de lo que ya podría llegar a estar.

Se levanto y volví mi vista a su cuerpo, específicamente a uno de sus muslos, tenia una cicatriz en su muslo izquierdo, como si se hubiese quemado.

Fruncí el seño y me levante para quedar detras de ella, apoye mis manos en su cintura, estábamos frente al espejo, así que claramente podía ver su cara. Tome la ropa de donde la había escondido y se la deje enfrente de su cara, cuando estaba por tomarla la quite rápidamente.

─ ¿Qué es eso que tienes en tu muslo? ─ pregunte agachando mi cabeza para susurrarle al oído

─ ¿Me estabas viendo el trasero? ─ pregunto girándose para quedar frente a mi, y dándole la espalda al espejo.

Levante la vista mirando el espejo, para poder tener un mejor panorama de su cicatriz, solo que mis ojos se desviaban de vez en cuando. Ella pareció darse cuenta de lo que hacia por lo que paso sus manos hacia atrás cubriendo su trasero, sonreí levemente y la mire nuevamente

─ ¿Qué te sucedió? ─ pregunte

─ Eso no te concierne y en caso de que lo haga no te lo diré ─ tomo la ropa que escondía detras mío y comenzó a cambiarse.

Cuando termino, se calzo y se coloco un poco de perfume, paso por mi lado, su fragancia era de flores y olía exquisito, ese perfume le quedaba bien como todo.

─ Cuando salgas cierra la puerta y apaga la luz, Aegan ─ y sin más rodeos salió de la habitación, dejándome solo.

Sonó un teléfono y mío no era, mire la cama era el de ella, lo tome y tenia contraseña, pero aun así lo leí por arriba.

Nachitooo 𐐪
    Nos vemos en la noche, princesita. Ya sabes donde buscarme, besitos en tu colita hermosa. ♡

¿Quién es Nacho? ¿Y porque se van a ver? ¿¡Y PORQUE LE MANDA BESOS EN LA COLA?!

Respire y deje el teléfono sobre la cama, apague la luz y cerré la puerta... que digo cerré.. más bien la azote, y camine dando zancadas por el pasillo hacia la puerta principal. Ella estaba comiendo la torta que había hecho hoy en la tarde, apoyada en la mesada.

─ ¿Aegan? ─ pregunto, y antes de que tomara las llaves de la casa se paro delante mío

─ Sal de mi camino ─ hable, pero... ¿Qué me esta pasando? nunca fui así, ¿Estaba celoso? no.. no podría estarlo, ella y yo no somos nada, no conozco a ese tal Nacho, y además si le decía que estaba celoso me pediría que me justifique y ni yo se, la respuesta.

─ ¿Estas bien? ─ pregunto y reaccione cuando sentí sus manos sobre mis mejillas ─ Hey.. ¿estas aquí, conmigo o en la luna?

─ Estoy aquí.. ─ la mire y me separe estando a una distancia razonable, pero aun así tome las llaves de la casa junto con las de mi camioneta

─ De acuerdo... ─ Se separo sacando sus manos de mis mejillas ─ ¿A donde vas? ─ pregunto caminando hacia la mesada

─ A buscar a una amiga ─ hable con la intención de darle celos, ella solo siguió comiendo y luego me miro

─ De acuerdo, solo pido que me dejes dormir ─ hablo antes de llevarse un trozo de torta a la boca.

Maldita seas, T/n.