Cαsh, Cαsh, Cαsh

⛧ 𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟮𝟭 ⛧

"...𝑶𝒚𝒆, 𝒐𝒚𝒆.. 𝒔𝒐𝒚 𝒚𝒐..." 

"...Oye, oye.. soy yo..."

T/n Santors 

No se si podría llamarlo suerte, pero si. Tenía a Jack que manejaba como si en cualquier minuto el mundo se acabaría. Y realmente se sentía algo así, Owen no me dio detalles, solo me dijo que Aegan había tenido un accidente, que estaba en el hospital... y que.. bueno, no estaban seguros de que llegara a sobrevivir. 

En todo el viaje me había dedicado a mirar por la ventana, ansiosa. Eran puros campos y demás, no se veía nada más que hectáreas con animales. Hasta que comencé a ver pequeños destellos de luces al fondo. Estábamos llegando, comencé a jugar ansiosa e impaciente con mis anillos. 

Jack estaciono en el aparcamiento del hospital, y salí del auto casi de un salto. Ambos entramos al hospital, una sensación de tristeza me inundo el pecho en cuanto puse en pie dentro. Odiaba los hospitales, porque un vida podía llegar como irse.  Y en estos momentos, deseaba con fuerzas de que se quedase. 

Me acerque a la recepción con apuro, y cuando quise hablar las palabras se habían quedado en mi garganta, ¿por que no podía hablar? Jack se dio cuenta de esto, por lo que coloco una mano en mi hombro y miro a la chica del otro lado del mostrador. 

─ Venimos de visita, al paciente Aegan Cash 

─ Bien, necesito que firmen aquí. ─ nos entrego una planilla

Ni siquiera la leí, tome la lapicera y firme para pasársela a Jack, quien hiso exactamente lo mismo. Así que si nos estaban pidiendo permiso para meternos en una secta, nosotros como dos idiotas accedimos. Pero eso era lo que menos me importaba en estos momentos 

─ Perfecto, habitación 349, séptimo piso. ─ menciono dándonos dos placas con la palabra "Visitante" a cada uno  

─ Bien gracias 

Con una sonrisa forzosa, salí de allí hacía el ascensor, presione el numero 7, y me cruce de brazos esperando. Cuando se oye el característicos ruido que hacen los ascensores indicando que llegaste a tu piso, salí y comencé a buscar la habitación impacientemente. 

─ 325... 338... 

─ Aquí, 349 ─ me dijo Jack quien iba un poco más atrás que yo, ya que apenas se abrieron las puertas salí corriendo ─ ¿Por cual llegaste? 

─ 367 ─ mencione y abrí la puerta, para llevarme la peor imagen posible 

Aegan acostado en la cama, sus ojos cerrados y con millones de cables en sus brazos. En su ojo izquierdo había un gran moretón y un rasguño en la parte de su frente. En su cuello habían varios rasguños al igual que en varias partes de su cara. 

A paso lento, me acerque hasta quedar a su lado, con cuidado tome su mano entre la mía y deje un beso. Mis ojos comenzaron a aguarse, mi nariz a picar y mi pecho se cerró. Mire a Jack, y el con una sonrisa salió de la habitación. 

─ Aegan... ─ pase con cuidado mis dedos por su cabello azabache ─ Dime que paso? Por favor. Prometo no regañarte, o bueno, quizás si. Dependiendo de que haya pasado ─ baje mi mano hacía su mejilla donde la acaricie suavemente. 

─ Te tengo un juego, que tal si te despiertas y me cuentas, ¿va? ─ dije mirándolo ─ Por favor. 

Sentí como una agarre en mi mano, por lo que baje la vista hasta nuestras dos manos juntas, y vi como su dedo indice se movía, lento, pero lo hacía. Nuevamente lo mire, y decidí seguir hablándole.