Capitulo 5: Desahógate

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Muchas veces preferimos guardarnos nuestros problemas para nosotros mismos, tal vez porque no nos gusta hablar de ellos con cualquier persona, o simplemente porque no queremos molestar a alguien que tal vez ni siquiera le importe como te sientes.

Alguna vez hemos tenido ese cruel sentimiento, la impotencia de no poder llorar, de no poder gritar a los cuatro vientos el como te sientes, simplemente lloras mientras te bañas o gritas en silencio.

Pero no podemos vivir con nuestro propio dolor para toda la vida, algún día terminarás desahogandote. ¿Cuando?, mañana, en una semana, en un mes, en un año, no lo sabemos pero algún día lo harás, podrás desahogarte completamente, gritar, llorar, maldecir, pero hazlo, jamás te guardes tus sentimientos, saca todo lo que tienes dentro.

Y eso es lo que caracterizaba a nuestro querido ojiesmeralda llamado Izuku Midoriya. Toda su vida fue bulleado por sus compañeros quienes se sentían mejores por el simple hecho de tener un Quirk, y es que en esta sociedad dónde el 80% tiene un Don, era extraño encontrar un "Quirkless", y esa fue la mala fortuna que persiguió a nuestro peliverde por muchísimo tiempo, pero el no se rindió, no dejó de sonreír, no dejó de creer en que podría llegar a ser un héroe.

Pero, a pesar de obtener su don heredado de ni más ni menos que el héroe número uno All Might, a pesar de entrar a la mejor escuela de todo Japón, a pesar de conocer a muchas personas que se convertirían en sus amigos, a pesar de lograr controlar ese poder que tanto tiempo le hizo daño, a pesar de ir a misiones, salvar incluso a una pequeña de las garras de un malvado villano, a pesar de todo eso, el jamás había tenido la libertad de contar cómo se sentía realmente.

-Traumas
-Desprecio
-Odio a sí mismo
-Ganas de no haber nacido
-Tristeza
-Enojo

Era lo poco que realmente sentía muy dentro de él.

Pero llegó el momento, el momento en que el no aguantó más y simplemente se quebró. y no estaba solo, ahí estaba ella, la hermosa azabache: alta, fina, con un cuerpo que muchos envidiarian, la más inteligente del salón y con uno de los dones que a él le parecían más interesantes.

El no lo podía creer, la persona que hizo que el por fin lograra desahogarse estaba frente a el, era el momento de soltar todo lo que tenía....el momento de hacer lo que nunca había hecho, el momento era ahora.

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-Yo....lo siento! Fui un completo idiota! Te grité y solo querías ayudarme....de verdad lo siento vicepresidenta!!!- El peliverde lanzo su mirada al suelo arrepentido mientras apretaba sus puños

-Oye...levanta la cara- Con un tono tranquilo ella habló- Eres un humano y todos nos equivocamos, si me gritaste, si me sentí mal, pero no es momento de hablar de esto, si no de lo que hay aquí- ella se acercó a él y puso su mano en su pecho

-Entonces....me está perdonando?- Preguntó inocente

-Es un poco tierno de su parte- Pensó mientras asentía a la pregunta del chico

-Se lo agradezco muchísimo, pensé que tendría que darle unos días libres para que me perdonara- Comentó su plan de perdón

-Bueno, si me quieres dar unos días libres....yo no diría que no- ella empezó a jugar con sus dedos tiernamente

-Los tendrá- con una sonrisa en su rostro el la miró

-Vaya, si que cambia su actitud de repente, hace unos minutos estaba llorando y ahora sonríe.... pero hay algo-

Amor PresidencialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora