30 DÍAS SOUKOKU (OTP)

DÍA 19: USANDO ROPA FORMAL

Habia algo que Dazai odiaba más que los perros y eso eran las fiestas de gala que constantemente le organizaban a su novio en la sede de la mafia portuaria. Odiaba tener que hacer eso todos los años y cuando a su novio se le ocurriera hacer algún encargo exitosamente. Odiaba tener que ponerse esas fastidiosas camisas y esos horrendos sacos de telas caras, lo peor de todo eran las corbatas, como las de testaba y maldecia a la persona que la hubiera creado.

Pero ahí estaba, poniendose la maldita corbata frente al espejo cuando Chuya entro a su habitación.

-¿Ya estas listo?- El pelirrojo se ponia ese feo sombrero mientras le sonreia. "Maldito sentifo de elegancia", Se repetía una y otra vez el castaño.

-No quiero ir~ Me ahogan las corbatas, Chibi. No quiero morir con una corbata atada a mi cuello, quiero una soga.- Parecía que el castaño se derretia sobre los brazos de su novio que rapidamente rodo los ojos.

-Solo serán unas horas, no será toda la noche.- Le decia el pelirrojo acomodando "apropiadamente" la corbata del más alto.

-Pero prometiste pasar conmigo todo la noche y pues, intentar mini Chuyas.-  El castaño lo abraso por la sintura y lo miro con ojos suplicantes, sabia que si parecia uno de esos animales mugrosos a los que odiaba, tenia más oportunidades.

El pelirrojo estaba de bien humor el día de hoy y no queria que su novio lo arruinara, lo amaba pero era fastidioso, asi que se limito a negar con la cabeza.

-Ane-san nos esta esperando, Dazai. Sabes como se pondrá si llegamos tarde y no volveremos a ver el sol si no llegamos- El castaño bufó y se endereso para luego solo salir de la habitación.

Chuya sabia que Dazai estaba molesto ya que no le habia dicho ninguna estupides en lo que llevavan del trayecto a la dichosa fiesta, ni siquiera le dirijia la palabra, pero eso si, cada cuando lo miraba reprobatoriamente. Al llegar Kouyou los recibio con una sonrisa y mimando a Chuya y alabandolo por su buen trabajo y el castaño, nuevamente, solo bufaba. Toda la fiesta se la habian pasado sentados en la mesa mientras veian como los demas se divertian, en un silencio un tanto incomodo hasta que el pelirrojo decidio ablar.

-¿Estas molesto?- Se golpeo mentalmente por una pregunta tan torpe ¡Claro que estaba molesto!

-No, Chibi... solo me siento traicionado...- Respondio el castaño en un tono serio, mirando a otro lado y recargandose en la palma de su mano sobre la mesa.

-¿Traicionado...?- Ahora el se sentia culpable. Habia veses en las que no entendia ni un poquito a Dazai.

-Si, Chuya.- El castaño lo volteo a ver muy serio y el pelirrojo sintio un pequeño escalofrio en la columna; hace mucho tiempo que su novio no lo llamaba por su nombre.

-Yo se que Osaki es también parte de tu familia, y la respeto como mi antigua superior y cuñada, pero aceptar su invitación en un día como este me duele, Chuya.- Dazai se levantó, y rodeo la mesa para quedar frente a Chuya pero mirandolo de reojo con una expreción triste.

-Te esperare en el departamento.- Y sin decir nada más se fue.

El pelirrojo muy confundido y un poco culpable se quedó mirando en la dirección en la que se fue su pareja, hace años que no veia una mirada tan seria y fria en sus ojos. Entonses comenzo a analizar lo que dijo al irse "¿Por qué le doleria que hubiera una fiesta de Ane-san ese día?¿A que se referia a un día como ese?¿Habia una fecha importante?". Y entonses sintio que le calló una bomba de realidad en ese momento.

Olvido completamentte que hoy era su tercer aniversario como pareja de Dazai. ¡HOY CUMPLIAN TRES AÑOS DE NOVIASGO Y SE OLVIDO POR COMPLETO DE ELLO!. Salio casi corriendo del gran salon elegante y pidio disculpas a su mentora diciendole que no podia quedarse.