EL FINAL

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Mis ojos se abrieron con dificultad por culpa las gotas de agua que bajaban por mi cara.

Puse una mano sobre mis ojos para que se pudieran acostumbrar poco a poco a la claridad. Cuando pude abrirlos bien visualicé el lugar donde estaba. Estaba tirada en el suelo detrás de un tubo de metal grueso. El suelo en el que me encontraba tirada estaba totalmente mojado, como todo mi cuerpo. Miré hacia mi ropa. Me fijé en que tenía puesta la misma vestimenta que la mafia que mató a Ivanov. También observé que tenía armas de todo tipo. Me toqué la cara y miré mi mano; pintura roja y azul se escurría hacia el suelo por el agua. Seguidamente decidí dar una ojeada a lo que estaba a mi lado. Así que giré mi cabeza y me encontré con un cuerpo tirado rodeado de un charco de sangre. 

¿Qué había pasado? ¿Por qué no recordaba nada? ¿Qué hacía en ese lugar con esa ropa y empapada?

Había tantas dudas en mi cabeza que ni siquiera me di cuenta de los disparos que sonaban a mi alrededor. Deje mi estado de confusión cuando una bala rozó mi hombro derecho y me levantó la piel de ese lugar. Miré mi hombro y sangraba ligeramente así que no me preocupé.

- ¡Calíope, has despeltado! - gritó un chino poniéndose a mi lado. 

Juraría que le había visto en algún otro sitio... Recordé que le había sacado el día anterior de la cárcel cuando liberé a todos los presos. Pero, ¿por qué estaba con él en ese lugar? 

Decidí ignorarlo y visualizar mejor el entorno. Estaban los tubos metálicos en los que yacía escondida, también había una estructura de hormigón con una puerta y en el suelo estaba pintada un H con un círculo, para que aparquen los helicópteros, y por último había sangre. Mucha sangre. Ese sitio me sonaba. Levanté más la vista y pude ver edificios rodeándonos. Era una azotea el lugar en el que estaba. La de la Comisaría exactamente. Pero la pregunta era que hacía allí. 

- Xiaomi, Calíope, nos van a matar. Tenemos que avisar a Nadando de que actúe inmediatamente. Ya han abatido a Calaveras y a Gringo. Diablo tiene un tiro en la pierna y necesita parar la hemorragia. Tenemos que terminar ya con esto. - dijo un chico joven.

Calíope... ¿Acaso me hablaban a mí?

- Volkov está abatido, Evans tiene un tilo en el blazo. Vamos a vel si conseguimos abatil a Holacio. Y Gleco está bajo contlol. Solo nos faltan Confleis y Holacio. - 

- ¿Pero no me oyes? ¡Llama a Nadando de una puta vez! Calíope llámale. - 

Ese chaval me gritó a la cara. Yo puse una cara confundida. Dijo que tenían que abatir a Horacio. ¿Y Gustabo? Me encontraba muy confundida. 

Con mi mente desordenada me levanté sujetando la pistola que estaba a mi lado. Cuando estuve de pie, levanté mi brazo y di tres tiros al aire. 

Ni siquiera entendía porqué lo había hecho.

Lo bueno fue qué todas las personas se callaron y se formó un intenso silencio.

Observé que Tonet el mecánico estaba en el suelo a mi lado con un tiro en la cabeza. Manolo y un chico que no había visto en mi vida estaban tirados en el suelo seguramente desmayados o muertos. Detrás de la estructura de hormigón se asomaba una mano, la del comisario Volkov. Se escuchaban quejidos y susurros de voces tanto masculinas como femeninas.

Yo respiré agitada - ¿Qué cojones está pasando? ¿Estamos todos locos? - mi voz salió casi como en un suspiro - Esto parece una cacería. No sé de que va todo esto pero me causa nauseas. Que alguien llame a una ambulancia o algo. - 

Yo no era una persona a la que le gustaban las guerras. No sabía que había pasado pero en cualquier caso ya era suficiente. 

- ¿Ahora te causa nauseas? Tú lo empezaste. - dijo una voz grave que conocía a la perfección. 

Felicidad // SpainrpDonde viven las historias. Descúbrelo ahora