Felicidad // Spainrp

DISPAROS

- 10:00, Comisaría. -

Había pasado un mes desde que tuve el accidente. Ya estaba curada y volvería al trabajo. Así que me puse mi pasamontañas azul fosforito con una camiseta azul pastel y las botas con cordones azules y el chaleco y pantalón de policía y me fui a hacer 10-33.

- Hola Charlotte. Me alegro que estés de vuelta. El abuelo ya nos dijo que has faltado este mes por la muerte de tu madre, lo siento mucho. - dijo Horacio al verme.

- Gracias Horacio, yo también me alegro de verle. - le dije seria.

- Buenas comisaria, ¿como está? - dijo ahora Gustabo amablemente.

- Bien Gustabo, gracias ¿y ustedes cómo están? - les dije.

- Ahora que estás aquí mejor. ¿Hacemos 10-33? - dijo Horacio alegre.

Yo reí levemente.

- Claro vamos. - comuniqué por radio que íbamos a patrullar juntos al superintendente.

Nosotros fuimos hacia la armería para coger lo necesario.

- Menuda energía que lleváis hoy. - dijo un agente que entró a la sala y vio a los dos chicos hablando animadamente.

- Estoy en modo diablo compañero. - dijo Gustabo alto.

- Exactamente, modo diablo, cojones. - dijo el agente animado.

- Ahí, eso es. - decía Horacio por detrás.

- ¡Ayer me comí un culo! - gritó de repente Gustabo para después irse de la sala.

- ¿Perdón? - dijo el agente bajo.

- No les haga caso y atienda las denuncias de inmediato. - le dije poniendo un poco de orden.

- 10-04. - dijo y se fue.

... ... ... ... ... ... ... ... ...

Estábamos yendo hacia un código 3 cuando Horacio cogió una llamada. Estuvo un minuto hablando.

- Gustabo, me ha llamado Emilio. Quiere que nos reunamos. - dijo Horacio en voz baja.

- Vale, acabamos el código 3 y vamos con él. - dijo él.

- Querrás decir que empezáis el código 3. - dije yo corrigiendo.

- Si eso, eso. - dijo Gustabo.

Y así hicimos. El código fue un éxito y ellos se iban a ir.

- Chicos, suerte con ese tal Emilio, tened cuidado. - les dije intentando no parecer que me importan mucho.

Me imaginé que iban a quedar con Emilio Escobilla y sabiendo cómo era Pablito, su hermano no me daba muy buena espina. Aunque la vez que hablé con él fue muy amable, había algo de desconfianza en su tono de voz que creaba a la vez desconfianza en mi.

- Gracias Charlotte, lo tendremos. - dijo Horacio y tras eso me dio un abrazo al que yo le correspondí con unos pequeños toques en la espalda.

- Ya basta, suficiente amor por hoy. Adiós. - dijo yo separando me dé el y despidiéndome de ellos con la mano.

- Adiós Char, cuídate tu también. - dijo Gustabo y se fueron.

Yo me quedé organizando la malla, haciendo papeleo y todo eso que nadie quiere hacer. Hasta que llegó el comisario Greco.

- Hola, debes de ser la comisaría Charlotte, ¿me equivoco? - me dijo él mientras yo firmaba unos papeles.

- 10-04 comisario Rodríguez. Debo felicitarle por su excelente trabajo. - le dije tranquila mientras seguía con el papeleo.