Felicidad // Spainrp

APOYO

- 09:45, Apartamento. -

Cuando me desperté me dolían los ojos. Los tenía hinchados a causa de el llanto de la noche. Pude dormir dos horas. Me sentía débil, sentía una gran impotencia al no poder cambiar el pasado. Me sentía culpable de su muerte, de la muerte de mi mejor amigo. Él hubiese hecho lo inimaginable para salvarme, pero yo, ¿que hice? Nada. Llorar y gritar. Como una niña de cinco años. Una cosa tenía de bueno, no iba a actuar de esa forma nunca más. Antes me matan.

Decidí ir a desayunar. Caminaba lentamente hacia la cocina en cuanto vi la estantería con el alcohol. Cuando me di cuenta, ya estaba delante de esa estantería. Cogí una botella de Vodka blanco y la abrí. Llevé la botella a mi boca y bebí un trago grande. En ese momento estaba destrozada por dentro y quería llenar ese vacío con cualquier cosa. Mala idea haberlo llenado con Vodka. Caminé de nuevo a mi cuarto. Puse música y comencé a beber la botella. En soledad, con un lento baile dejándome llevar por la música.

Pasó un rato y decidí parar la música. Tenía media botella. Me dirigí hacia la calle.

Estaba en el suelo sentada delante de mí casa. Con la botella a mi lado y mi pijama de lencería con una bata por encima. Recordé el día de ayer y las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos recorriendo mi rostro hasta mi regazo.

- ¡Puta mafia de mierda! ¡Venid a matarme ahora hijos de puta! - comencé a gritar con todas mis fuerzas. La garganta me dolía. Cogí la botella y bebí un trago.

Noté como alguien se sentaba a mi lado. Esperaba que fuese alguien de aquella mafia. Giré mi cabeza y vi a Gustabo. Fruncí el ceño, volví a mirar hacia delante y cogí la botella. En cuanto iba a beber una mano me la quitó.

- ¿Que coño haces? - dije enfadada. Cuando le miré vi que estaba bebiendo de ella.

- ¿Vas a ser la única que va a disfrutar del Vodka? - dijo con una sonrisa ladeada.

- Es mío. - dije yo.

- Ahora ya no. Cuéntame, ¿que haces sentada en frente de tu portal en pijama? -

- Vivir la vida. Algo que puedo hacer todavía. A no ser que algún hijo de puta me mate. Ojalá me mate. - una lágrima salió de mi ojo.

- ¿Que te pasa? -

- Ayer mataron a Ivanov y a Gonetti. Les fusilaron en frente mío y de mi padre. - dije sin pensar lo que decía, estaba borracha. Gustabo se mantuvo unos segundos en silencio procesando la información.

- Joder... Lo siento. De verdad. - me dijo. Tras decirme eso me abrazó.

Estuvimos abrazados unos minutos. Yo lloraba sin control.

- Venga, tranquilízate. Todo este dolor va a pasar, el tiempo lo cura todo. Eres fuerte, Ivanov lo sabía. - me susurraba Gustabo.

- Gracias... - le susurré con la voz rota.

Me separé de él y encogí mis piernas hacia mi pecho haciéndome una bola.

- ¿Quien es tu padre? - soltó de repente.

- La gente de por aquí no tenéis muchas luces. -

- Ja ja, ahora en serio. -

- Papu. El super. Abuelo, el viejo. Conway, o Jack. Como quieres llamarle. -

- ¿El viejo es tu padre? -

- Si. Pero cómo si no lo fuera. - dije con odio.

- Estoy flipando... - dijo para después dar un otro trago a la botella.

- Eso no es lo importante gilipollas. ¡Lo importante es que una puta mafia de mierda ha matado a Ivanov! Y yo no hice nada... -

- ¿Que ibas a hacer? ¿Plantearles cara para que te metan un tiro? -