0.17

763 27 0
                                    

-veo q viniste querida-

Me senté en una silla enfrente de ella con una mesa con tazas de té y tostadas. La mujer se sento enfrente y me sirvió te.

Las dos vecinos a la vez, estaba bueno tenía un sabor a menta y manzana.

Un silencio inrrumpio, quería respuestas pero no quería ser tan repentina tampoco. Me arte.

-quiero respuestas- deje la tasa en la mesa y le miré a los ojos.

-si así lo quieres querida- la mujer iso q extendieron la mano y la tomo.

-cierra los ojos y no los habrás asta q yo te diga- dude en hacerlo pero lo ise si era la forma de saber lo q me pasa.

Sentí como todo daba vueltas y una luz brillaba en la oscuridad, la mano de esa mujer sujeta a la mía.

-abre los ojos- dijo abrí los ojos de golpe lo q me dio un poco de mareos más, estábamos en un jardín en una casa muy bonita.

Reconocí un árbol.

-Elisabet!- el recuerdo de mi madre corriendo mientras atacaba a mi hermano.

-es un recuerdo verdad- dije mientras caminabamos para ver mejor.

-no pero casi haciertas, es tu historia Elisabet la q te queda por terminar. Pero empezaste a temprana edad- miramos por una ventana y vi a mi mamá. No pude evitar algunas lágrimas.

Estaba cargándome en brazos de pie mientras me mecía y por atrás pareció...papá no parecía el, tenía piel humana, cabello rizado y nariz. No evite reírme.

Le abraza por atrás mientras me miraban.
-seras una gran bruja- dijo mi madre a lo q mi padre solo te dio beso.

Derrepente no había nada en esa ventana, solo oscuridad. Minerva estaba a mi lado de pie analizando todo el recuerdo.

-Tu madre...mi hermana siempre quiso a tu padre, pero el a ella no lo suficiente para salvarla- suspiro mientras pasaba su mano evitando q una lágrima cayera.

Ambas volteamos de nuevo a la ventana y una luz reluciente apareció, esta vez era mi padre buscando algo como loco. Como si dependiera de ella, en la biblioteca. Yo estaba sentada en un lado y mi madre tapándose la boca evitando q sus sollozos se escucharán.

-esta aquí, ella no es lo q parece- mi padre le decía a mi madre enseñándole un papel bruscamente.

Logré ver una palabra q se quedó en mi mente para poder analizarla inhumana, recuerdo a ver visto eso en hogwarts pero no sabía dónde.

-Necesitamos ayuda- mi padre me cogió en brazos, pero mi madre me arrebato de el.

-No, no dejaré q te la lleves. No sabemos q le aran si es algo malo ¡No quiero eso para nuestra hija!- las lágrimas brotaron de sus ojos.

-estas loca, no sabemos q es y la llamás hija- mi padre le apuntó con su varita.

-me prometieron q a ella no le ocurriria nada...mi madre me lo prometio- escuché mis llantos, en esa horrible discusión sin sentido.

-tu...sabías q pasaba-

La imagen se borró del gran ventanal. Otra vez vacío y oscuro.

Mire a Minerva q q tenía la mano en su pecho, intentando no llorar en frente de mi.

-ella lo sabía...para protegerme- dije con frialdad.

-es una maldición querida, en nuestra familia. Cada tres generaciones alguien la tiene q conllevar- hizo una pausa para proseguir peor la interrumpí.

UN AMOR DE SLYTHERIN (+18) /Draco y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora