El método Aiger (Aiger Akabane)

Capítulo 6

15 años

—Y luego fue por la izquierda lo más rápido que pudo para dar un golpe directo que lo llevará a la pared. Ya sabes, buscando quitarle energía; luego otro golpe más contra el borde de la arena y Bam ¡Final explosivo! —Sonrió orgulloso bajo la mirada neutral de la albina —Traté de usar lo que me dijiste, estrategia más que fuerza bruta ¡Estuvo bastante dinámica! Tenías razón ¿Cómo siempre tienes razón?

Lya arrugó ligeramente su nariz antes de estornudar. 

—No siempre tengo razón —Aclaró. Aiger no pudo evitar mencionar sarcásticamente.

—Obvio no, señorita nunca me he equivocado.

—... —No le ponía incómodo el silencio que se formaba luego de un comentario. Ya se estaba acostumbrando (A buena hora Aiger, solo cuatro años después de conocerse).

—¿Y cuando viene Shu otra vez?

—La siguiente semana —Aiger abrió los ojos emocionado. Podrían tener batallas si ella lo dejaba ir a su casa.

—¿Puedo...?

—Me da igual —Alzó los brazos con una gran sonrisa.

—¡Eres la mejor! —Celebró el chico, Lya regresó al libro de Fisica que estaba leyendo. Justo cuando Aiger iba a preguntarle sobré qué tema leía, llegaron los chicos del club de Bey. 

Debía admitir que últimamente pasaba un poco más de tiempo con Lya.

—Hola chicos —Saludó Suoh con una sonrisa. Detrás de el venía Ranjiro, con Fubuki a un lado. Parecían estar discutiendo algo.

—Genial, más bladers —Murmuró Lya por lo bajo. Aiger no pudo evitar sonreír divertido al escuchar eso.

—Yo también te quiero —Comentó Fubuki, sentandose justo frente a la albina. Lya ni si quiera levantó la mirada.

—¿Cómo ha estado el fin de semana largo? —Preguntó Suoh. Bien se sabía que hubo un evento y que ella estuvo presente (Era el chisme de la semana).

—Lúgubre y lleno de muertos para variar —Respondió. Ranjiro ladeó la cabeza confundido.

—¿Visitaste una morgue? —Le preguntó el rubio de extravagante peinado, denotando su extrañeza con la voz.

—Te visito el club de Bey —Afirmó el pupilo de Shu. Lya asintió lentamente, sin quitar su atención del libro de física —Bueno, tienes suerte de llevarte bien con todos ellos. Son muy buenas personas —Ella le miro tranquilamente, con la frialdad que la caracterizaba.

—¿Qué le pasa a Genji? —El nombrado parecía inmerso en su conversación por el celular. Fubuki se asomó escasamente a la pantalla del celular, sin que su amigo se diera cuenta.

—Oh, está hablando con Suki, déjalo.

—¿Su novia?

—Si —Asintió tranquilamente y regresó a su libro —Aiger, estuviste fenomenal en el duelo de ayer —El castaño le quito importancia con un gesto, sin poder evitar sonreír orgulloso de si mismo —De verdad, ha sido una buena ejecución —Lya no pudo evitar mirarlos de reojo, notando como Aiger parecía orgulloso de si mismo.

—No es para tanto, solo apliqué lo que Lya me dijo —Explicó el castaño en general.

—No sabía que Lya era tu asesora —Se burló Fubuki ganando una mirada de la nombrada —Y dime ¿No podrías ayudarme a mi también? —Fue ignorado por completo, el rubio sonrió de lado y continuó su conversación con Aiger.

—Entonces...¿Lya es una posible blader en secreto?

—¡Parece que así es! De no saber que no le gusta nada el Beyblade, lo pensaría en serio —Aiger notó como Lya se pasaba la mano por el flequillo, justo como Shu...Sonrió al notar lo parecidos y diferentes que eran al mismo tiempo.

—Oigan, no se olviden que la siguiente semana empiezan finales —Recordó Suoh, guardando su celular. Algunas quejas se escucharon de los tres bladers restantes.

—Ugh.

—Odio estudiar.

—Por eso no apruebas Aiger —Dijo Lya, para luego escuchar un lloriqueo falso por parte de Aiger.

—Oye, es que no se me dan las matemáticas. No es que repruebe por gusto, te juro que me esfuerzo —Lya, con su frialdad de siempre, ni siquiera lo volteó a ver —Tu estudias mucho. Nunca lograré entender ese amor a saber muchas cosas. Lya ¿Puedo estudiar contigo porfavor? —La nombrada, sin dejar su libro (Impresionantes habilidades de concentración) contestó.

—Si prometes no hablar de Beyblade, puedes. Necesitas concentrarte —Sentenció, cambiando de página.

—Prometido —Llevo su mano derecha a su pecho, en un juramento improvisado —Nada de Beyblade.

—Suena a opresión —Comentó Ranjiro, en voz queda. Tratando de no llamar la atención de la albina...Le parecía aterradora.

—Es una dinastía —Se burló Fubuki —La gran monarquía de Lya Kurenai.

—En primer lugar —Comenzó a explicar Lya. Fubuki y Ranjiro compartieron una mirada aburrida —Una dinastía y una monarquía...

—Si Lya, no me interesa —La chica cerró la boca y siguió leyendo su libro. Aiger hizo una mueca, el quería saber lo que iba a decir...

—¡Suoh! ¿Puedes venir por favor? —Le preguntó una chica cuyo nombre ignoraban, el albino asintió y lloriqueó por lo bajo.

—Suki estaba libre, espero sea rápido ¿Me acompañan, Fubuki, Ranjiro? —Luego de despedirse y de quejarse un poco, los tres bladers se fueron dejando a Lya y a Aiger como estaban.

—Lya...¿Qué ibas a decir sobre las dinastias y monarquias? —La albina dejó lo que hacía para luego explicarle a grandes rasgos las diferencias entre ambos sistemas políticos.

Aiger debía admitir, que se sentía verdaderamente estúpido a un lado de la de apellido Kurenai e imaginaba que de igual manera se sentían los demás, sin embargo no era razón para mandarla a callar así o interrumpirla cuando iba a decir algo interesante, eso desde el punto de vista de Aiger. 

Sentía que no lo hacía con mala intención, había notado que Lya era algo distraída en cuando a los sentimientos de la gente y soltaba datos y comentarios, con el fin de informar, sin tomar en cuenta el efecto que podían causar.

Para Aiger, Lya era buena en todo...Excepto en este punto. Imposible ser bueno en todo.