El método Aiger (Aiger Akabane)

Capítulo 19

—Muy bien, todo comenzará con las batallas de equipos. La alineación será anunciada en unos días, no olviden entrenar y mejorar, si vemos mejores resultados pueden modificarse. —Toko se pasó una mano por el pelo, bastante concentrado —El programa de entrenamiento conservará su contenido, y extenderá su duración ¿Preguntas?... —Al alzar la vista vio una mano levantada, fuera del grupo de Bladers. No pudo evitar poner una ligera mueca de desagrado. —¿Lya?

—¿Dónde está Aiger? —Preguntó la albina. Se escucharon algunas risas y murmullos entre el grupo de Bladers, Tomo, armándose de paciencia, contestó.

—En la azotea.

—Gracias. —Aliviado de que solo fuera esa intervención, se relajó notablemente. Lya ya estaba de camino a las escaleras cuando se detuvo y se giró hacia Toko. —Ah y una sugerencia, si quieres mejorar no puedes mantener el mismo programa de entrenamiento, a los deportistas de primer nivel se les recomienda un entrenamiento personalizado, basado en sus aptitudes, destrezas y debilidades. —El de cabello turquesa sonrió forzadamente. —Si siguen igual no mejorarán, el tiempo de entrenamiento tampoco servirá si no trabajan en eso.

—... —Asintió. —Gracias Lya.

—No es nada, solo trato de que sean exitosos. —Respondió la joven mirando hacia el equipo. —Aunque pierdan su tiempo entrenando.

—... —La risa de Suoh se escuchó desde la entrada del gimnasio, parecía estar entrando a penas, Toko lo miró con molestia, la misma mirada que le había lanzado a Lya. —¿También tienes algo que decir Suoh? —Toko, normalmente era tranquilo, pero Lya le ponía los nervios de punta.

—Nada que decir. —Se colocó a un lado de la joven, para luego hablarle a ella directamente. —Vamos Lya ¿Vienes por Aiger?

—Si, dijo que tenía que presentarme a todos formalmente... —Toko bufó por lo bajo. —Lo que sea que eso signifique, porque al menos que tengan amnesia, no necesitamos presentarnos.

—No seas tan dura, se está esforzando en lo que sea que esté haciendo. —Le apunto Suoh con suavidad. —Nos vemos arriba Toko. —El nombrado ni si quiera se molestó en responder, se limitó a regresar sobre sus pasos para ir a con el equipo. —Vamos Lya.

—Suoh —Llamó alguien de abajo, el joven de quince años giró para encontrar a alguien del equipo. —A que no sabes quién está afuera justo ahora, pero se quedó en la puerta porque sonó su celular. —Suoh, bajó las escaleras de inmediato, bajo la mirada de burla del Blader.

—¿Quién llegó? —Preguntó Toko al ver cómo Suoh se había apresurado a la entrada.

—Suki Kang. —Lya bajó las escaleras que había subido para ver a donde iba el muchacho, que ya estaba abrazando a la más baja, que seguía hablando por teléfono entre risas. Toko asintió para luego pedirle al Blader que siguiera entrenando. Al ver qué Lya no se iba, se atrevió a preguntarle. —¿Qué pasa? ¿No te ibas a buscar a Aiger?.

—... —Lya ladeó la cabeza sin dejar su expresión neutral, aún con sus ojos sobre la pareja.

—¿Celosa? —Bromeó Toko, ganando una mirada fugaz de la albina. —... —La sonrisa del de cabello celeste disminuyó de a poco, hasta tener una mirada algo alarmada. —¿Te gusta Suoh? —Lya le miró finalmente, para luego continuar su camino a dónde supuestamente estaba Aiger, ignorando por completo la pregunta. —Oye...¿Eso fue un...?

—No. Que tontería. —Sentenció la chica, dando por concluido el tema. Aún así, Toko no se quedó nada tranquilo.

Lya terminó de subir las escaleras para encontrarse con los gritos de los Bladers, entre emocionados y alarmados.