Para Jennie y Lisa no fue fácil estar juntas. Cuando lo logran al fin llevan una vida completamente feliz, hasta que aparecen viejos amores o quizás nunca lo fueron.
《2ª TEMPORADA 》
《3ª TEMPORADA 》
🔞 GIP > SI NO ES DE TU AGRADO SOLO PASA DE LARGO...
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Tumbó a Jennie en el escritorio, sin preocuparse de la tinta corrida y de los folios arrugados. Más se iba a correr ella. La penetró de nuevo, fuerte. La morena se arqueó, con una respiración cardiaca.
- ¡Grita! – le dijo Lisa, entrando en pleno placer, y se hundió más en ella.
Ella jadeó. Parecía mentira, como disfrutaba con aquella mujer. Giró la cabeza viendo a todo el cúmulo de personas, arriba, abajo, intercambiando papeles, información, riendo o hablando. Y ellas ahí dentro, haciendo el amor.
- ¿Te excita? – dijo la pelinegra, apartándose el sudor de la frente y moviéndose dentro de ella. - ¿Te gusta ver a toda esa gente allí? ¿Y que yo te esté follando, aquí?
- Si... - jadeó ella. – dios, sigue, esto es buenísimo...
Lisa la cogió de las caderas y la penetró más intensamente. Jennie arqueó su espalda y los primeros espasmos de placer colapsaron su cuerpo, su mente, su todo.
La agente terminó por acompañarla, en uno de sus culminantes orgasmos compartidos. Se quedó así, quieta, sin salir de dentro de ella. Con los ojos nublados y entrecerrados, con el calor abrumándole el cuerpo. Con los pantalones bajados, y ella, la falda subida hasta por debajo del pecho. Las dos estallaron en risas. Esa situación era graciosa. Jennie se incorporó, subiendo los bóxer de su novia, y luego los pantalones, de igual forma Lisa la ayudó a subirse las bragas, las medias y a colocarse bien la minifalda.
- Esto ha sido, corto... pero intenso. – dijo Jennie relamiéndose.
- Me gusta. Me gustan todos nuestros polvos. – sonrió Lisa. – Por cierto, esta noche, toca donde tus padres.
- Sí. -suspiró la morena– Parece mentira que solo quede un mes para la boda. – se alegró, pero Lisa se dio cuenta del cambio de tema.
- Amor – la miró seria.
- ¿Mmm?
- ¿Quieres que hablemos de algo? – dijo ella acariciando su rodilla. – ¿Concretamente, de tu familia...?
- Oye, ¿me acompañas a la salida? Le dije a Rosé que viniera a las once porque tenía que hacer unos recados. – sonrió. – esos recados han terminado... - Y muy bien.- Y son las once y cuarto. La pobre ya me estará esperando para que abra la clínica.
La pelinegra asintió. Pero aun así, no se quitaba la duda de la cabeza. ¿Por qué mierda Jennie, siempre evitaba el tema de la familia?
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Lisa terminó de mirarse en el espejo. Era la primera vez que veía a los padres y a las hermanas de su prometida y estaba nerviosa. Se arregló el cuello de su blusa mientras terminaba por bajar las escaleras encontrándosela a ella, a ellas, mejor dicho. Pero sus ojos fueron directo a Jennie su ángel. Esta vez iba de lavanda y le quedaba como anillo al dedo. Unas sandalias negras con plataforma en la palma. Un vestido con un escote de barco y con una falda de tubo que llegaba por medio muslo. Sexy. Su hija, iba hermosa, como siempre. Para comérsela. Con su blusita color coral y unos shorts negros, la esperaba la mano de su madre.
