Capítulo 21 - Excusas

931 88 6
                                    

Música para acompañar los capítulos: 

Lady Gaga - I'll never love again

Justin Timbarlake - Mirrors


Capítulo 21 - Excusas 

Sábado por la mañana decidí irme a casa de mi hermana y pasar el día con mis sobrinos. Mi hermana agradecería y yo estaba deseando verlos. Cuando estaba a punto de salir de casa, recibo una llamada de Steven.

—Hola chava, ¿Cómo estás? —dijo enfatizando su acento puertorriqueño.

—Muy bien ¿y tú?

—Fenomenal. Chica, ¿cómo van las cosas con ese tu amigo?

—¿Qué amigo, Steven? No sé de qué hablas.

—Sí, sabes. El que tiene el perro guapete marrón. No me acuerdo su nombre...

—Toby —contesté sin más.

—Ese. Pues eso... ¿cómo estáis los dos?

—Y ¿Por qué crees que estamos los dos? —Seguía dando vueltas para llegar al punto inevitable. Y Steven era todo menos tonto.

—A ver... no me tomes el pelo, Francesca. Es obvio que estáis juntos. No apareces, no dices nada hace siglos, ¿a quién quieres engañar? —dijo.

—Vale, sí, estamos juntos, pero es complicado. Ya lo sabes. Veremos cómo va...

—Francesca, tengo que contarte una cosa. Lo vi esta mañana —su voz dejó de ser tan cantarina como siempre y adquirió un tono más serio.

—Bien y ¿entonces?

—Lo vi en el centro comercial. Cogido de la mano de una joven que imagino era su prometida y se les veía muy felices, contentos y románticos. ¿Estás segura de lo que estás haciendo con ese chico?

—No es problema mío.

Dos palabras y vuelvo a la realidad de golpe. Su prometida. Supongo que la sorpresa debe dibujarse en mi voz y supongo también que a Steven no pasó desapercebido.

—Mira, no me ando con rodeos, ya me conoces. Los rodeos son una estupidez —Guarda silencio un puñado de segundos—. No quiero que te vuelvan a hacer daño. Confío en ti y en que vas a hacer lo correcto para salir de esto bien. O entrar. No lo sé. No sé qué es lo que quieres, pero lo que sí sé es que tienes que tomar decisiones. Y me consejo es que las tomes ya.

Está feo que lo diga, pero aquello me dio cierto asco y rabia. Escuchar de la boca de un amigo, otra vez, que debo tener cuidado con quién salgo, es demasiado para mí. Respiré tres veces mentalmente para relajarme y centrarme en ser asertiva.

—Tienes razón y voy a arreglar el problema. No puedo seguir así, especialmente después de las amenazas de Luca...

—¿¿¿Queééé??? —¡Ostras! Fue en ese momento que me di cuenta de que había hablado de demasiado— ¿Has hablado con el sinvergüenza?

Steven sabía de toda la historia, con pelo y señales. Desde que llegué a Boston fue una de las personas que más me ayudó a integrarme y es como un hermano mayor para mí. Pero a veces es sobreprotector y puede llegar a ser demasiado pesado.

—Steven, por todo lo que es sagrado para ti, no le dirás a mi hermana ni a nadie lo que he dicho. ¡Mierda! No debería haberlo mencionado.

—¿Encima me lo ibas a ocultar? Vamos a ver, chiquilla, ¡¿tú quieres que salga ahora de mi casa y vaya directo a tu puerta?! Me vas a contar todo lo que pasó y ni se te ocurra ocultarme nada. Francesca, no estoy para bromas.

Regálame un bichito |ROMANCE JUVENIL| TERMINADA & COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora