En dos meses hizo lo que otro no pudo en dos años.
...
Llevaba saliendo con Steve dos meses, nos habíamos hecho grandes amigos. A veces pasaba a recogerme del colegio, me visitaba en mi casa e íbamos de paseo, o simplemente nos quedábamos platicando por horas en el jardín; los temas de conversación nunca faltaban y sus regalos tampoco. Todos los días recibía un ramo de rosas, ya fuera en mi casa o escuela y si él no podía llevarlas las enviaba, pero jamás faltaban.
A su lado el tiempo se me hacían minutos, cuando menos nos dábamos cuenta ya había anochecido y tenía que marcharse. La sensación cada que se iba era deprimente, no me gustaba sentirme abandonada y tampoco quería que se fuera, pero no era nadie para hacerlo quedarse.
-¿Estás saliendo con él? - preguntó Alonzo frunciendo el ceño, íbamos saliendo del colegio.
-No la molestes - respondió Sandro; Cami hoy no vino, estaba de viaje por parte de un proyecto escolar – Ella puede salir con quién quiera.
-Sandro tiene razón, Alonzo. Pero para tu información no; no salgo con él, sólo somos amigos.
-¿Entonces aún tengo oportunidad? – me detuvo acercándome a él; un escalofrío recorrió mi espina dorsal y Sandro se aclaró la garganta haciéndome señas con la mirada.
-¿Interrumpo? – cuestionaron severamente a mis espaldas.
-No – me separé rápidamente del chico - ¿Qué haces aquí?, Pensé que no vendrías.
-Vine a darte una sorpresa.
-Y el sorprendido fue otro - susurró Sandro ganándose una fulminante mirada mía - Ya nos vamos – se excusó nervioso – Alonzo – éste último suspiró resignado y se marchó.
-Dijiste que no podrías venir hoy.
-¿No te alegra verme?
-No seas tonto, sabes que sí.
-El chico que va con Sandro, ¿es tu novio? – indagó con un deje de molestia.
-¿Qué? – alce una ceja, confusa. ¿Acaso está celoso?
Rodó los ojos dando media vuelta – Olvídalo – parece crío, pensé viéndolo caminar hacia una camioneta negra.
-Aguarda un momento - corrí quedando delante de él - ¿Estás celoso? – inquirí sonriendo divertida.
-¿Tendría que estarlo?
-En lo absoluto – me encogí de hombros; abrió la puerta del copiloto haciendo ademán que subiera.
-Steve, ¿por qué hay maletas atrás?, ¿a dónde vamos?
-Es una sorpresa – sonrío dejándome con la intriga; increíble ver ese cambio de emociones, hace un minuto estaba bastante serio y ahora luce una hermosa sonrisa, en fin. Decidí no seguir preguntando, me limité admirar el paisaje hasta que me quede dormida.
Steve Coleman.
-Ni diez minutos y se quedó dormida – me orille acomodándola mejor en su asiento, subí la ventana de su lado y mejor encendí el aire del carro.
Estos 2 meses a lado de Emma han sido increíbles, a medida que la conozco mis sentimientos por ella crecen. Cuando me presenté ante mi ángel, aquí en Italia, tenía miedo de ser rechazado y doy gracias que no haya sido así. Durante este tiempo he tratado de ayudarla a superar y recuperarse de su pasado con el imbécil de Liam; Alessandro me contó su historia, sé cuánto la dañó ese tipo y por lo mismo no quiero presionarla a nada, quiero tomarme mi tiempo con ella.
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MI INFIERNO PERFECTO
Ciencia Ficción"Yo me enamoré de sus demonios, ella de mi oscuridad. Éramos el infierno perfecto." ☆ Steve Coleman y Nahiara Volkov ☆ - III Libro, Saga MC - ... Para los que no conozcan a los personajes, tendrán que leer "El rey"...