CAPÍTULO 26

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Steve Coleman.

Cuando Damián terminó de contarnos su encuentro con Liam me quedé en una batalla contradictoria, mis ganas de matarlo seguían latentes, sin embargo que haya intentado buscarnos para ponernos sobre aviso me confunde. << ¿Por qué lo hace?, ¿Quién se lo llevó? >>, Son mis preguntas principales.

-Muchas gracias Dam - Nahiara lo abrazó - Y te pido una disculpa por las molestias, me habría encantado estar reunida para platicar de nuestras vidas y no sobre esto.

-Descuida, podemos reunirnos cuando gustes e igual podrían visitarme en New York - me miró - Será un placer recibirlos a los dos.

-Gracias - sonreí sincero. Honestamente no pensé que un sujeto con el cual tuvo quereres pudiera agradarme, supongo se debía a la diferencia abismal de su comportamiento con Liam, pues mientras él actuaba rencoroso y posesivo, Damián entendía que ya no figuraba nada en la actual vida de mi esposa; respetó nuestra relación desde el primer momento y sus intenciones de querer retomar su amistad no tenían dobles intenciones.

Durante el regreso a casa le contamos a Kyle, no obstante tuvo una pésima idea - Deberíamos buscarlo - lo miré como si le hubiera salido un tercer ojo, queriendo cerrarle la boca a puñetazos - No me mires así y piénsalo bien. Les dijeron que se lo llevaron para que no lo mataras y utilizarlo en un plan contra Nahiara. ¿Por qué?

-No nos dijo.

-Nadie se atrevería a meterse con ella sabiendo quién es. La persona detrás tiene que estar muy loca u odiarlos para querer iniciar una pelea y lamento decírtelo hermano, pero ese tipo es el único en saber de quién se trata - le di un último vistazo fulminante antes de mirar a mi pelicobriza.

-¿Qué opinas? - apreté suavemente su pierna llamando su atención; volteó encogiéndose de hombros, sin mostrar rastro de emociones.

-Kyle tiene razón, sin embargo no quiero ponerte en una encrucijada - regresa su cara mirando hacia afuera con decepción - Liam es muy volátil - menciona - Conociéndolo estará arrepentido, me suplicará perdón e intentará agradarte siendo manipulador, pero al final sus celos lo dominarán. Siempre fue así y jamás cambiará.

Definitivamente caí en una encrucijada. Por una parte, la dolencia en su voz advierte que tenerlo cerca será malo para ambos, pues si mi mujer está mal yo también y no necesito eso dado que está embarazada; no obstante mi hermano tiene razón. Podría investigar por mi cuenta, de hecho Alessandro, Evan y demás del clan están ayudándome, pero mientras más rápido sepa quién y por qué quiere lastimarla, más pronto acabaré la amenaza.

-¿Dónde lo encontramos? - pregunté resignado.

-Enzo, ¿recuerdas el camino que tomó Calixto?

-Si Señora - él cambio de dirección y luego de media hora llegamos a una pequeña casa apartada de las demás.

<< Parece desierta >>

-Fabrizio, aseguren el perímetro e intervengan las señales - asintió haciendo señas silenciosas - Kyle cuídanos la espalda, entraré por detrás.

-No será necesario - de su pantalón sacó un brazalete, convirtiendo el dije de estrella por una llave; la introdujo en la cerradura y sonrío arrogante - Es tan predecible e imbécil - negó adentrándose como si fuese la dueña. La seguí, no sin antes pedirle al pollito quedarse junto a la entrada vigilando.

-Es... vintage - susurré criticando vagamente su decoración.

-Quiso dejar la decoración de sus abuelos - murmuró pellizcando mi brazo como reprimenda.

-Perdón - me disculpé pensando en los difuntos y no en su mal parido nieto - ¿Estás segura que está aquí?, no se escucha ruido y tampoco hay luz.

-Está aquí - agarró un jarrón dejándolo caer al suelo. Lentos y sigilosos pasos se escucharon arriba; mi ángel alzo una ceja socarrona, rodé los ojos mirando las escaleras y en efecto, ahí estaba con su estúpida cara sorprendida siendo adornada por dos cicatrices gracias a mí. La primera bajo su ojo izquierdo y la segunda en su tabique, más aparte su herida de bala.

MI INFIERNO PERFECTODonde viven las historias. Descúbrelo ahora