Capítulo 6

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Las miradas de envidia de las jóvenes nobles recaían en la princesa, la belleza de esta misma no podía ser comparada con la de los demás

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Las miradas de envidia de las jóvenes nobles recaían en la princesa, la belleza de esta misma no podía ser comparada con la de los demás. Sus ojos grises viajaban por todo el salón tratando de memorizar los rostros de los invitados. Quizás alguno de ellos le sean de ayuda en un futuro.

La noche avanzaba normal, jóvenes bailaban y disfrutaban de la fiesta. La hora del primer baile había llegado y la princesa Esther tenia que elegir a su acompañante, muchos jóvenes se le acercaban para invitarla a bailar, sin embargo, ella los rechazo a todos.

El rey, quien se encontraba en todo momento en su trono, se acerco con su rostro inexpresivo e hizo algo que nadie se imaginaba. Una reverencia elegante para luego estirar la mano hacia la princesa, quien lo observaba sin decir nada. Para no quedar mal delante de todos, imito la reverencia y acepto que su padre sea el primer hombre con quien bailaría.

El príncipe Jaén quería intervenir, pero su hermano lo detuvo antes de que creara una escena, resignándose se aparta para no ver como su hermana sufre tratando de ocultar el desprecio que está sintiendo.

- Perdón por hacer esto, pero no tenía opción. – habla el rey fingiendo una sonrisa.

- Siempre hay una opción, solo ha tomado el camino fácil, su majestad. – por otro lado, la princesa solo quería que toda esa farsa terminara lo antes posible.

- ¿Puedes llamarme padre? – pregunta el rey con vergüenza por tal petición.

- Voy a ser sincera con usted, majestad, - habla la princesa recalcando la ultima palabra, - usted dejo de ser mi padre en el mismo instante en que nacimos, en el momento en que dejo que ese monstruo se hiciera cargo de nosotros.

La princesa hablaba con el mayor de los desdenes, odiaba a su padre y estaba segura de que jamás lo perdonaría por haberlos abandonado en el mismísimo infierno, pero en su rostro no se reflejaba ese odio. Parecía una estatua con la misma expresión en todo momento y lugar.

Los nobles veían aquel acontecimiento como algo normal entre padre e hija, veían la escena como si fuera sacado de un cuento infantil en donde la maldad no existe, pero esta es la realidad y si esos nobles supieran la verdad, quedarían completamente impactados.

La princesa sentía que la canción era eterna, como si los segundos pasaran aun mas lento de lo normal y no solo era por su disgusto, algo malo estaba pasando y nadie más se daba cuenta.

Dirigió su mirada hacia sus hermanos y en el mismo instante en que cruzan miradas, sabe que ellos también se han dado cuenta.

- Sigue bailando, - Habla de repente el rey.

- ¿A que se refiere? – pregunta ella fingiendo ignorancia.

- Se que te has dado cuenta, - dice el rey mirando a su alrededor buscando a su mano Izquierda, el duque Massimo Georgiou Dubois, quien ya estaba actuando según la situación, - El duque Massimo se encargara.

La princesa sabia cuyo padre era poderoso, pero no tenia el conocimiento de que él también sabia de magia, después de todos, eso es lo que estaba sucediendo. Un bloque de tiempo estaba haciendo todo más lento, pero ellos podían moverse sin problemas, eso era una clara señal de la magia en sus cuerpos.

- No se que está sucediendo, pero debemos irnos, - habla el emperador guiando a la princesa a la cámara de seguridad.

- ¿Y que pasara con los invitados? – pregunta la princesa con preocupación genuina, - ¿Mis hermanos dónde están?

- Los guardias se encargarán de evacuar a los invitados, - dice el rey empujando a su hija para ir más deprisa – tu eres mas importante en estos momentos.

- No sea hipócrita, - habla la princesa enojada por las palabras de su padre, - usted, majestad, tiene que proteger a su reino y no huir con la cola entre las piernas, - el rey se quedo sin palabras, - ahora, haga algo antes de que pase a peor.

No tuvo más opción que llamar a un guardia y pedirle que proteja a la princesa, que la lleve con sus hermanos, estaba seguro de que ellos la protegerían mucho mejor que los guardias o caballeros más prestigiosos del reino.

Estaba comenzando a aparecer una niebla espesa que te podría dejar ciego en cuestión de segundos, los nobles comenzaban a darse cuenta de lo que estaba sucediendo a su alrededor y entraban en pánico, gritos de mujeres y hombres llenaron el lugar.

- Venga por aquí, princesa, - Habla el guardia guiándola lejos del escandalo y no donde se lo había ordenado su padre.

Ella se dio cuenta de lo que tramaba el supuesto guardia. Lo siguió fingiendo estar asustada. Preguntaba por sus hermanos a cada segundo para disimular.

La falsa princesa débil y sentimental estaba haciendo su aparición.

- Todo estará bien, ya llegaremos al lugar, - La princesa Esther aun no sabía a donde iban.

Conocía el castillo, pero no por completo y sabía que había pasadizos secretos de los cuales no tenia conocimiento alguno.

Los gritos quedaron atrás, el silencio y la oscuridad los rodeaban aun mas por cada paso que daban. De un momento a otro estaba rodeados por múltiples hombres encapuchados, sus rostros estaban cubiertos con una fina tela negra dejando a la vista solo los ojos.

No tendría miedo, no iba a temer ser asesinada sabiendo que ella es más fuerte, lucharía sin dejar que la lastimen. No iba a permitir que le pusieran un solo dedo encima sin su permiso.

- ¿Qué es lo que esta sucediendo? – pregunta separándose del hombre que fingía ser un guardia de su reino.

La risa de los hombres se hizo escuchar en el lugar. Una risa despreciable y aterradora para los demás.

- Que estúpida princesa, - habla uno de ellos, por su tamaño y ego, parecía ser el líder del grupo. - ¿Acaso es tan ciega para no darse cuenta de lo que le sucederá?

Ella sabia lo que pasaría, sabia que no sería fácil salir de esta, pero lo lograría.

- Sera asesinada...

Esa risa insoportable volvió aparecer para dar lugar a un silencio abrumador, podía parecer que en cualquier momento te dejaría sordo por lo estrepitosa que era. La princesa Esther no se dio cuenta en que momento cae completamente inconsciente. 

Queen: Una mujer igual puede gobernar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora