Survivors (Minho & tú)

Capítulo 16

-¿Podemos descansar un poco? Me muero de cansancio- digo sofocada, además de que el sol ya está saliendo poco a poco, no hemos dormido desde que empezó la tormenta que nos hizo meternos en el refugio de Jorge, y desde ese momento han pasado muchas cosas.

-Sí, yo también estoy cansado, podemos descansar una hora porque no estamos lejos- dice Jorge sentándose en una piedra de los escombros que nos rodean. El resto nos apoyamos en una pared que está partida por la mitad, pero milagrosamente sigue de pie.

-¿Quieres?- me pregunta Minho dándome algo de comer.

-Gracias- le agradezco con una sonrisa.

-Toma, es lo único que he podido encontrar en mi despacho- dice Jorge sacando algo de su bolsa, es una cajita transparente donde hay un pequeño algodón y una tirita- Para tu herida. Lo cogí por si te volvíamos a ver con vida

-Gra...gracias- digo asombrada.

-De nada, y siento mucho haberte devuelto a esa gente, gracias a haber visto lo que ese hombre ha hecho sin pensárselo dos veces, sé el doble cómo es esa gente

-No te preocupes, yo también haría lo mismo si unos desconocidos pertenecieran a CRUEL- digo riendo, Minho coge la cajita y la abre, moja con agua (porque no tenemos otra cosa) el algodón y lo acerca a mi herida, evito mirarle a la cara para no ponerme nerviosa. Fijo mi mirada en un punto del suelo y me aparto con dolor cuando el algodón entra en contacto con la herida.

-Lo siento- se disculpa.

-No pasa nada- respondo, él está fijo en limpiar mi herida y yo no puedo evitar pasar de mirar al suelo a mirarle a él. Los primeros rayos de sol se están asomando por el este, y hace que pueda apreciar mejor la belleza de Minho. ¿Por qué no me he fijado antes en él? Antes del Laberinto, antes de....todo. Tiene unos ojos rasgados que le hacen el doble de atractivo, y qué decir tienen sus labios...Vale, cálmate Jessica.

Minho me mira un segundo y luego vuelve su mirada a la herida, no sin antes poner una sonrisa arrogante que me hace sonrojar y apartar la mirada. Paseo mi mirada por todo el lugar hasta ponerla en Newt, está de pie con los brazos cruzados y a su lado está Aris, los dos me miran con una sonrisa pícara y yo vuelvo a sonrojarme.

-Ya está- dice Minho cuando termina de ponerme la tirita- Deberías ponerte crema en la cara, parece que te has quemado- bromea sabiendo que en realidad estoy sonrojada y no quemada por el sol, se levanta y mira a Newt y Aris, los tres ríen y es ahora cuando quiero matarles.

Decido dormir un poco, ya que tan solo han pasado unos minutos desde que hemos empezado el descanso. Me sorprende cómo Minho no está cansado, entonces pienso en seguida que en el Laberinto seguro que era corredor, mi duda sale de mi boca en cuanto se pone a mi lado.

-Eras corredor antes, ¿cierto?- pregunto con una sonrisa.

-Sí, ¿tanto se me nota?- dice mirando a sus brazos, refiriéndose a su buena condición física.

-No es por eso, idiota, es porque no te cansas tan rápido- digo rodando los ojos con una sonrisa, a mi otro lado Fritanga se ríe.

-También- dice riendo- ¿Tú que hacías?

-Al principio fui corredora, pero luego averigüé que se me dan bien las armas y construir cosas- digo con una sonrisa- Ser corredora no era lo mío, creo que lo habéis podido ver- todos reímos.

-Descansar mientras podáis, lo que queda de día será movidito, os lo aseguro- dice Jorge.

Me apoyo en el hombro de Minho y cierro los ojos, lo primero que se me viene a la cabeza es Janson, ha sido idiota por su parte tirarme de ese helicóptero, ya que él se quería asegurar de que me tenía entre sus garras y no iba a poder volver a escapar de ellas, pero en realidad él es el que me ha dejado escapar sin poner resistencia alguna. Claro que seguramente no se esperaba que Minho me salvara de esa manera, así que estoy muy segura de que tiene muchas ganas de verme morir, lo cual no me importa porque yo tengo las mismas ganas de verle morir a él.

Los recuerdos con mi falso padre me atormentan durante todo el sueño, hasta acabar teniendo una pesadilla.

-Jessica- me sobresalta la voz de Minho.

-¡No!- grito cogiendo fuertemente el brazo de Minho, está de pie frente a mí, con el brazo que le estoy sujetando estirado hacia mí, su mano se encuentra en mi hombro.

-Es hora de seguir. ¿Estás bien?- me pregunta preocupado.

-Sí, solo he tenido una pesadilla- digo sacudiendo la cabeza para despertarme del todo, me levanto con su ayuda y seguimos nuestro camino.

Caminamos lo que a mí me parecen 20 interminables minutos, además el sol ya está en lo alto del cielo y hace bastante calor, aunque a veces corre una brisa bastante fresca que se agradece.

Jorge para su caminata y nos advierte para que paremos de caminar nosotros también.

-Ese tío- dice señalando a un hombre vestido de un granate muy oscuro, con pelo rubio oscuro y con una sonrisa que no depara nada bueno- Ese es Marcus

-¿Quién es Marcus?- digo siendo consciente de que me he perdido algo.

-Ese es el tío que nos ayudará a encontrar al Brazo Derecho

-Parece más alguien que va de fiesta todos los días a alguien que de verdad puede ayudarnos- digo con una mueca.

-Ese es su trabajo, si Thomas y Brenda están en algún sitio, estarán ahí dentro

-¿Y cómo hacemos para entrar?- pregunta Newt, miro a Jorge y también me está mirando.

-No vamos a ir a su fiesta, querido Newt- responde Jorge con una sonrisa, sonrío porque sé que tiene un plan.

Minutos después nos ponemos en marcha, después de haber repasado como 5 veces el plan de Jorge.

-No vamos a dejarle ese trabajo a Jessica- dice Minho.

-¿Crees que no soy capaz?- pregunto con las cejas levantadas, Aris ríe a mi lado.

-Minho, deberías aprender más sobre Jess- dice mi mejor amigo, sonrío con maldad y nos ponemos en marcha.

¿Que cuál es mi parte del plan? Pronto lo veréis.