Amor, Mafia Y Venganza ©

Capítulo 7

¿Normal?

Andrea

Y si, llegó el día, es lunes, si antes odiaba los lunes con todo mi ser, pero ahora los odio aún más, ¿Por qué?, fácil, porque hoy tendré que ver a mi jefe después de todo lo que pasó este fin de semana, fingir que nada pasó, no volver a repetir y por último poderlo mirar a los ojos y no querer lanzármele encima.

Enserio no sé lo que me pasa con él, ósea lo odio por hacer que siento esta atracción sexual tan fuerte hacia él y además no poderme controlar, yo soy una persona con un autocontrol muy alto y solo lo veo a él y no sé lo que significa la palabra auto o control y mucho menos que significan cuando están juntas.

Me levanto de mi adorada cama, me baño y pongo la ropa de trabajo, tomo un pequeño desayuno y hablo con Kira, ella me da fuerzas y me cuenta chismes para apaciguar la situación.

Cuando llega la hora de irme tomo muchas bocanadas de aire y me preparo mental y físicamente para lo que se viene.

No hubo tráfico, justo hoy no hubo, oh valla, <<Gracias Dios>>, ¿Me estas castigando por todos mis pecados?, ósea, ¿No podías castigarme otro día, en otro momento?, siempre pero siempre es siempre hay tráfico para llegar al trabajo y hoy por arte de magia las calles estaban desoladas, el destino quiere que llegue rápido, porque llegué en un tiempo récord.

Entro, y ya la mayoría está en sus puestos de trabajo, saludo a mis compañeros y voy a mi lugar porque ya hay mucho trabajo atrasado, mi jefe por suerte no está, <<espero hoy no venga, ni nunca>>, se me acercan a hablar sobre la noche del viernes y me hacen sacar muchas sonrisas.

En una de esas conversaciones se me sale una carcajada, que en serio, nunca me había reído tan fuerte en mi vida, para mi mala suerte justo llegó el jefe, oh no, siempre me pasa a mí, justo en el peor momento a ese señor le da por venir y yo que deseaba no verlo por lo menos por una eternidad, yo no pido mucho.

- Williams, a mi oficina; Dardmons a su puesto de trabajo, ya - demanda, Zoé sale corriendo y yo blanqueo los ojos, el alcanza a verme y me frunce el ceño, pero sigue a su oficina y yo lo sigo.

Yo caminé a paso de tortuga así que cuando llegué él ya estaba en su escritorio esperándome con los brazos cruzados y recostado en la silla, oh que hermosa y deliciosa vista la que tengo al frente y no hablo del paisaje, hablo del espécimen de mi jefe, no, no, Andrea controla tus hormonas, por Dios mujer.

El voltea a verme, recorre todo mi cuerpo con su mirada y luego mira hacia la puerta.

- Ciérrala - ordena, inmediatamente lo hago, pero estoy como en un shock visual, solo hago movimientos involuntarios y de resto no puedo moverme por mí misma.

- ¿Qué esperas? - dice y por fin reacciono y me siento en el sofá de la primera vez que vine a esta oficina.

- ¿Pasa algo? - pregunte fingiendo ser muy segura de mí misma y lo soy no me malentiendan, pero en este momento no se ni como me llamo, jaja, sé que soy muy exagerada, pero es cierto.

- Si, pasan muchas cosas - se levanta de su asiento y se para firmemente frente a mí y yo comienzo a temblar.

- Dígame entonces - digo en un hilo de voz.

- Primero, a mí no me blanquees los ojos; segundo, no es hora de estar riéndose sino de estar tra-ba-jan-do y tercero deja de mirarme así que pareces una acosadora - dice y me pongo roja - a, y deja de babear por mí - espera, ¿Qué?, ¿Babeando, yo?, trágame tierra y escúpeme en Plutón.

- A, a, a, mmm - comienzo a tartamudear, juro que yo antes tenía dignidad.

- ¿Que? - dice y pone una sonrisa picarona.

- Nada - digo moviendo mi cabeza de lado a lado.

- Aja - dice - a propósito ¿Por qué huyes de mí?, ¿A caso me tienes miedo o temes a no poder controlarte cuando estás conmigo? - pregunta y no sé a qué se refiere.

- ¿De qué hablas? - pregunto confundida, enserio no sé de qué habla.

- Mi casa, el bar y ahora - los enumera con los dedos - siempre quieres huir y ahora en lo único que piensas es en montarte encima mío o salir corriendo - dice y se encoje de hombros.

- Lo uno si y lo otro no, tienes un ego muy grande Christopher - miento y me tapo la boca porque lo llame por su nombre.

- Ajá - se acerca lentamente hacia mí y casi pega mi frente con la suya, nuestras respiraciones se juntan y ninguno aguanta más la tensión, así que nos dejamos llevar por la situación y nos besamos apasionadamente, él se sienta el sofá y yo me monto encima de él.

- Oye, ya basta - me alejo de él y me levanto, organizo mi ropa y mi cabello y me alejo aún mas de él.

- Ven aquí Andrea - dice y da palmadas en sus piernas.

Muevo la cabeza en señal de negación - Ni en tus sueños, chao jefe - digo y salgo de ese lugar que parece el mismísimo infierno.

Voy a mi puesto de trabajo y comienzo a fantasear acerca de cómo sería tener sexo con mi jefe en su oficina, eso sería una fantasía sexual cumplida, pero eso no se va a poder porque esto no se va a poder repetir, sé que ya lo he dicho muchas veces, pero esta vez es de verdad.

*****

Y sí que lo cumplí, ya ha pasado una semana y media desde lo que pasó en la oficina, eh intentado evitarlo lo más que puedo y cuando tengo que acercarme a él pongo toda mi fuerza de voluntad y autocontrol, no niego el que muchas veces me fallaron y quería lanzármele, pero luego volvía a mi control sexual.

Pasado mañana se acaba el mes y tenemos que hacer un informe de todo el trabajo que hemos hecho en las últimas cuatro semanas. Cuando me dijeron que había que hacer este informe comencé a hacerlo y diariamente lo iba haciendo así que esta mañana hice los últimos ajustes y ya lo terminé.

Quiero dejar todo listo desde hoy por si hay un inconveniente más adelante, ya todos se fueron a sus casas y por eso puedo imprimir todo libremente.

La impresora de estos lugares de por sí son muy lentas, pero esta es todo lo contrario porque es rápida, imprimo el primer documento y continuo con el resto.

Escucho pasos apresurados pasar por el lugar, asi que decido esconderme y observar desde las penumbras, saco mi celular y tomo fotos, veo a tres hombres vestidos de negro entrando a la oficina de mi jefe, son muy sospechosos y raros, a uno de ellos lo reconozco porque es el chofer que nos llevo a su casa el día del bar, cierran la puerta y yo mando las fotos al numero privado que tengo en mi celular e inmediatamente borro para mi el mensaje y las fotos de mi galería para que no quede ninguna prueba.

Termino mi trabajo y cuidando de que nadie me escuche, organizo todo y salgo de ese lugar, quería escuchar lo que estaban hablando, pero yo no soy boba, en la oficina hay cámaras, ellos deben de estar vigilando así que me verían y no me puedo arriesgar, yo no se quienes son esos hombres y que relación tienen con mi jefe. Tomo la carretera hacia mi casa y esta vez sí hay tráfico, oh vaya, llego a mi casa y lo primero es recibir mi correo electrónico y veo que recibí una respuesta a mi mensaje con un "Bien hecho, pero necesitamos más".

<<Necesitamos más, necesitamos más>>, se repite ese mensaje en mi mente así que me pongo a investigar más para ganar inspiración y poder hacer más en mi libro.

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Hola, holaaa, ¿Cómo están?

Capitulo medio largo, poco a poco irán destapándose los misterios, pero enserio no saquen conclusiones apresuradas porque luego quedan Clown, créanme se los dice la clown de las clown JAJAJAJA.

¿Qué les pareció el capítulo de hoy?

Si te esta gustando la historia, ¿Me podrían ayudar con su voto, comentario y compartiendo la historia para que les llegue a más personas? Si lo hacen se los agradecería mucho, sé que es poco, pero llegamos a ¡¡120 vistas!! Enserio así sea lo más mínimo a mí, me alegra el día.

Los quiero mucho.

G. ❤️