APOSTEMOS A LA VERDAD

Capítulo 6

Cada uno de los presentes fue entrevistado por mí, personalmente. Dejé a Jin para el final, por supuesto. Hice que Rod la hiciera pasar y mandara a los demás a sus casas luego de decirles que nosotros nos pondremos en contacto. Al ver entrar a Jin a mi oficina la vi seria y distante pero tratando de mantener la compostura y disciplina. Yo igual lo hice, fui profesional y la traté de la misma forma que a los demás. Le hice unas cuantas preguntas referentes al trabajo y cómo podría ser la mejor opción para este puesto.

Debía de admitir que su currículum estaba impecable y no veía ni una sola mentira en esto, pues sabía mucho más de Jin que otros.

-Entonces, Jin -dejé los papeles a un lado y la miré fijamente, notando su nerviosismo disimulado- ¿Por qué estás solicitando este trabajo?

Ella sabía muy bien a qué me estaba refiriendo y a qué quería llegar con esta pregunta, pero aún así prefirió evitarlo.

-Pues conocí esta empresa por medio de recomendaciones y al investigar supe que me traería beneficios si consigo el puesto -responde.

-Sabes que mi pregunta es más concreta... me gustaría que respondas -insistí.

-Creo que ya he respondido lo necesario -noté que apretaba sus manos entre sí y su tono de voz se helaba más.

-No lo que realmente quiero saber, y te recuerdo que estás solicitando un puesto en mí trabajo, un puesto muy cercano a mí... ¿Crees que puedo confiar en ti si empezamos ocultando cosas?

-Solo creo que su pregunta es más personal de lo que debería -tensó la mandíbula.

-Solo es personal si así lo crees tú, por favor... responde.

Jin parecía querer asesinarme o siquiera golpearme, pero suspiró profundo y decidió aceptarlo.

-Hubo un problema en mi clan hace un par de años, que terminó en una guerra civil. Aún no pudimos recuperarnos, hasta ahora se puede decir que somos el clan más pobre... Por eso quiero una nueva fuente de ingresos y tu empresa es la única que podría ayudarme.

La miré desconcertado, ¿por qué no supe nada de esto? ¿Jayd ha intentado ayudar? No me esperaba esa razón, una guerra civil es algo tan complicado que no me sorprende que esté buscando trabajos importantes para ayudar a su clan.

-¿Cómo ocurrió?

-Por favor, no quiero responder más preguntas sobre el tema -pidió bajando la mirada un segundo.

Quería saber, quería que me contara todo con lujo de detalle para saber si podía ayudar... pero creo que no era el momento ni lo correcto.

-Está bien, lo dejaremos hasta aquí.

-Gracias... -soltó en un murmullo.

Empezó a ordenar sus papeles mientras yo la observaba, con una pregunta más en la cabeza, de cómo había conseguido esconder sus alas para venir al mundo humano, pero después de todo sabía que no querría decirme nada más.

-Cuando salgas habla con Rod -comenté levantándome de mi lugar-. Él te dirá todo lo que necesites saber para comenzar a trabajar aquí.

-¿Qué? ¿Perdón? -me mira estupefacta.

-Como lo haz oído. Quiero que trabajes para mí.

Ella me seguía mirando sin decir nada por unos cuantos segundos pero entonces frunce el seño, no se veía muy contenta.

-Si esto es por lo que te dije de mi clan... no necesito tu lástima, ¿oíste? No quiero tu pena.

-¿Quién dijo algo sobre sentir lástima? -sonreí de lado-. Para serte sincero todos los que entraron aquí fueron mediocres o aburridos, incluso algunos han mentido en su currículum. Tú no, fuiste honesta y además... aguantaste el querer golpearme, y siendo tú eso es admirable.

Ella rueda los ojos mientras yo trataba de no reír, me acerqué a ella mientras agarraba sus cosas contra su pecho.

-Además... ¿por qué no querría que la mujer más hermosa que haya visto trabaje mí? -la acorralé contra el escritorio- ¿Tenerte cerca todo el día? Es un privilegio que si no acepto sería un idiota.

-¿Ni siquiera he empezado y ya debo ponerte una demanda por acoso laboral? -me empuja con una mano en mi pecho-. Quizás rechace la oferta y vaya a otra empresa.

-Ninguna otra va a querer pagarte lo que yo estoy dispuesto a pagar -comente-. Y tampoco te ofrecerán lo que yo lo haré... -enarca una ceja y espera a que hable-. Puedo ayudar a tu clan, lo haré con protección y bienes... Tengo amigos en todo el mundo, de distintas especies y clases sociales, puedo pedirles que vengan y ayuden a tu clan. Si aceptas... podrás conseguir productos de otras regiones, gratis.

Me mir con un brillo de esperanza en mis ojos, sabía que su clan lo era todo para ella y haría lo que fuera... esta era una oportunidad única que no podría estar dispuesta a rechazar. Su clan es su punto débil.

-¿Lo harías en serio? -pregunta apretando más sus cosas contra su pecho, ansiosa.

-Por supuesto -volví a acorralarla y acercarme a ella lo mas posible-. Solo tienes que aceptar trabajar conmigo.

Se veía tan tentada, pero a la vez tan intimidada. Apartó la vista por un segundo mientras luchaba en su interior, pero entonces vuelve a apartarme.

-Y..Yo... no lo sé -soltó-. No puedo.

Pasó por mi lado y salió casi corriendo de mi oficina. La vi irse sin querer detenerla, estaba sorprendido de que no aceptara esta oferta tan fácil como había imaginado, pro sabia con certeza que ahora que las cartas estaban sobre la mesa la tentación sería mayor. Solo era cuestión de tiempo.

Me crucé de brazos y me apoyé contra mi escritorio, Rod entró a la oficina con una sonrisa divertida.

-Así que era ella... realmente tienes gustos muy buenos, amigo. Lastima que no afloje fácil.

-Te lo dije, amigo... ella es diferente, es terca y obstinada... pero es lo que me atrae a fin de cuentas -respondí.

-No lo parece, después de todo nunca necesitaste insistir.

-Es bueno encontrarme a una mujer como ella luego de tanto tiempo, aunque Jin es mejor...

-Pues recuerda que solo tienes un mes para acostarte con ella, ni más ni menos.

-No necesitas recordármelo, lo sé. Pero tranquilo, sé que ganaré la apuesta -mi sonrisa de suficiencia no pasó por desapercibido-. No es más que una más, ya lo verás, caerá como todas las anteriores.

Ahora que Jin trabajará para mí, porque sé que aceptará tarde o temprano, tenerla cerca me ayudará a ganar esto.