Tu eres mi Angel

Capitulo 32

-Ponlo –dije nerviosa-.

Luke puso el video y nos sentamos en el sofá, se notaba a kilómetros lo nerviosos que estábamos, a Luke le sudaban las manos y no podía dejarlas quietas  y temblaba levemente. Yo tampoco me quedo atrás, las manos me temblaban, sudaban mis manos y cara y estoy segura que en cualquier momento se me saldría el corazón por la boca.

En el video se veían los pasillos del hospital y en una esquina decía la hora, pasaban los minutos y nada salía asique adelantamos el video hasta que reconocimos a alguien.

Megan.

-¡Detenlo ahí!

Se podía ver a Megan caminando por los pasillos y parándose en una puerta, sonrió y entró.

-Para la grabación –lo hizo- ¿puedes ver cuál es esa habitación?

Luke y yo nos acercamos lo suficiente a la pantalla como para poder ver bien, o almenos intentarlo.

-No veo nada –dije fastidiada mientras me dejaba caer en el sofá-.

-En esa sala guardan todos los reportes de los pacientes y también hay una fotocopiadora –dijo Luke sorprendido-.

-¿Tu como sabes? –fruncí el ceño-.

-se encogió de hombros- cuando llegue al hospital estabas inconsciente y mientras esperaba a que despiertes fui a dar un paseo –me miró- la puerta decía “solo personal autorizado” y bueno, me dio curiosidad y entré.

-Si esa es la sala donde guardan los reportes… -susurre- ¡Megan lo hizo!

-Aun no demostramos nada –fruncí el ceño-.

-Deja de defender a tu noviecita Hemmings –se sentó a mi lado en el sofá- ¿quieres ver que yo tenía razón? Ponle play.

Luke suspiró y después lo hizo, en el video Megan entró al cuarto con las manos vacías y después de unos minutos salió con dos reportes en su mano, hay que ser muy tonto para no poder ver que Megan es culpable.

-¿Ahora me crees? –dije mirándolo-.

-No puedo creerlo –susurró y empezó a caminar por toda la habitación-.

En cierta parte lo entiendo, digo, debe ser feo enterarse que tu novia te estuvo engañando todo el tiempo y tú nunca sospechaste.

-¿Estas bien? –dije acercándome a el-.

-No –se volteó quedando frente a mí- soy de lo peor –dijo mientras lagrimas se acumulaban en sus ojos-.

-Luke no es tu culpa –lo abracé- Megan siempre ha sido así de mala, no debes sentirte mal por a haberle creído, no eres el primero que le hace caso –le limpié las lágrimas-.

-No es por eso –puso su barbilla en mi cabeza mientras me devolvía el abrazo- yo te traté mal cuando tú me estabas diciendo la verdad ¡Te hice llorar! –Me abrazó más fuerte- No te mereces a alguien como yo –susurró-.

-Luke no me importa si me has lastimado ¿sabes cuantas personas me han lastimado peor que tú y aun así las he perdonado? –negó con la cabeza- Bueno yo tampoco ¡pero es porque han sido muchas! –reímos-.

-Deberías odiarme –susurró a centímetros de mi cara- ya sufres mucho con lo del bullying y yo solo te hice sentir peor ¿Por qué me sigues tratando bien?

-No eres lo que buscaba –se intentó alejar pero al segundo lo atraje hacia mí- pero me encantó encontrarte.

Luke sonrió, haciendo aparecer sus famosos hoyuelos, no pude resistirme y uní nuestros labios en un beso.