Lucas:
Once años viví en este mismo vecindario, y esta era la primera vez que veía que llegaba alguien nuevo. Pero no una familia entera, sino que era un único chico. Cabello negro y alto. Era intimidante, era como si estuviera en su propio mundo, desconectado del resto.
Estaba bajando unas cosas con ayuda de la señora Perkings, la dueña de la casa. Ella le hablaba y le hablaba, pero él permanecía callado, evitando cualquier tipo de contacto visual. Mi mamá y yo nos acercamos donde ellos estaban, y la señora pelirroja con voz cantarina le sonrío a mi madre. Ella siempre fue amable y alegre, aunque mi madre me contó que había tenido algunos problemas de más joven, pero no quiso explicarme en detalle.
- Hola, Anna - la sonrisa de la señora Perkings no desaparecía.
- Hola, Beth - mi madre le sonrió en respuesta. - ¿Quién es él?
Beth sonrió en dirección al chico que se paraba a su lado. Este miraba la caja que tenía entre las manos, perdido en sus pensamientos. La sonrisa de Beth estaba en el limbo entre la compasión y la felicidad. ¿Cómo era posible mezclar tantos sentimientos en un simple gesto como aquel?
- Él es Colton - fue lo primero que dijo sin dejar de mirar a Colton. - Tú sabes que nosotros buscábamos adoptar a alguien, y cuando él apareció y nos ofrecieron su custodia, aceptamos sin dudarlo.
Repentinamente, Colton levantó la cabeza y me miró. Sus ojos eran de un gris tormentoso y profundo. Parecía perdido, pero no del todo. Sus ojos me miraban detenidamente, casi sin moverse. Era intimidante, feroz y perturbada. Era una tormenta de sentimientos. Mezclados sin ningún orden aparente, dispersos y confusos hasta para él mismo. Su pecho se elevaba lentamente con el ritmo de su respiración, sus nudillos estaban blancos a causa de la fuerza con la que sostenía la caja, y sus ojos me miraban fijamente.
Sentí lastima, pero también miedo y una necesidad inexplicable de intentar conversar con él, de intentar ayudarlo. De ser su amigo. No sabía el por qué, pero la necesidad de que él confiara en mí era enorme. Mi labio inferior tembló levemente, pero luego logré hablar.
- ¿C-cuántos años tienes? - hundí mis manos en mis bolsillos, esperando su respuesta. Tardó unos segundos, parecía dudar.
- Trece - su voz no era muy grave. Asentí repetidas veces, sin saber que otra cosa decir. ¿Será tímido? - ¿Cómo te llamas?
- Lucas - respondí apenas terminó de formular su pregunta.
Mi mamá miró el reloj que tenía alrededor de su muñeca, y me tocó el hombro. La miré y ella simplemente me sonrió.
- Es hora de irnos - asentí, no de la misma forma que antes, sino que más relajado y tranquilo.
Ella se despidió de Beth, y seguimos nuestro camino. Nos habíamos alejado unos pasos de ellos cuando esa voz dice mi nombre.
- Lucas - no grita, pero tampoco habla demasiado bajo. Su tono era neutro, normal.
- ¿Si? - me di la media vuelta, y pude ver como sus labios se curvaban levemente, casi de forma imperceptible.
- Nos vemos - asentí y luego sonreí. Él se dio la vuelta y yo también. Ambos seguimos caminando por nuestro camino.
La imagen de esos ojos, tan parecidos a una tormenta feroz, inundó mi mente. ¿Qué le había sucedido? Era como si él no estuviera aquí, pero a la vez sí. Miré mis zapatos, preguntándome una y otra vez la misma pregunta.
¿Cuándo nos volveríamos a ver?
.-.-.-
Perdónenme!! Sé que tardé demasiado, es que tuve muchas cosas en mente. Comencé el colegio, tuve que estudiar, reanudé mis actividades y para colmo anduve medio enferma (además de saturada).
@AndreaSilva17 me mandó un mensaje, otras amigas me hicieron acordar y demás. Gracias enserio por su paciencia hacia mi persona y por esperar el siguiente capítulo.
Y tenía ganas de saber...
¿Ustedes tienen alguna hipótesis de lo que va a suceder en el futuro? Preguntenme y cuentenme!! Quiero saber!! :3
Un Kiss, SamNovels