Capítulo 14

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~•Tentaciones•~


Narra Mew:

No me atrevía a abrir mis ojos después de declarar mis sentimientos. 

¿Y ahora qué? ¿Qué dirá Gulf? ¿Cuál será su expresión? ¿Somos novios o...solo podemos seguirnos besando como lo hicimos hace unos segundos? ¿Se asustará y huirá saliendo del auto sumergiéndonos en una nueva pelea en la que le exija volver a entrar por su bien, así sea incómodo? ¿Me golpeará...?

Eso último no tenía sentido, él mismo exigió una respuesta y no lo veía como una persona capaz de un acto así. Talvez él...

¡¿Me dirá que también siente algo por mi?!

Abrí mis ojos de golpe ilusionado por el positivismo de mi último pensamiento, entonces pude ver que él también permanecía muy plácidamente recostado en el asiento, su rostro que reposaba en el respaldo aplastaba su mejilla haciéndola lucir aún más gordita... adorable. También tenía los ojos cerrados. ¿Será que tampoco sabe como reaccionar?

-Gulf...¿Gulf?- levanté una de sus manos que permanecía en su regazo junto a la otra, pero esta calló pesadamente otra vez en su lugar.

¡Genial! él...ni siquiera lo había escuchado.

-¡Gulf!- Nada

¡Maldito niño del demonio!

Quise golpear todo, golpearme a mí mismo contra el volante o la ventana, hice el ademán de esas acciones, pero solo terminé aplastando el botón de encendido y seguí maldiciendo el resto del camino.

"No pudo elegir mejor momento para sucumbir a los efectos del alcohol y quedarse profundamente dormido" (nótese el sarcasmo).

Lo miraba a cada tanto que los semáforos se ponían en rojo ¿Cómo volveré a tener el valor y temple para repetir mis sentimientos? Porque ahora mismo ya me sentía bastante estúpido por hacerlo y ser ignorado en el acto.

Pero no hay problema, porque mi beso lo había dejado tan devastado y cansado por el suvenir de placer que por eso terminó quedando inconsciente. Fue eso y no el alcohol...Sí debía ser eso.

Me estacioné en mi lugar privado y salí del auto para llevarlo conmigo. Todo mi lenguaje corporal demostraba frustración, porque hacía casi todo con brusquedad y descuido.

—Ven aquí bombón— abrí su puerta y coloqué mis manos a su alrededor —Ou...lo siento, mi mano tomó tu trasero por accidente, pero la regañarás después (cuando estés consiente y si lo recuerdas) pero ahora es necesario tomarte de esta forma para cargarte (por supuesto no era taaan necesario).

Su trasero era tan gordito y redondo, perfecto para agarrar su piel y sostenerlo de ahí fuertemente. Era muy tentador y mi ego lastimado no tenía intenciones de ser delicado.

-Por suerte no pesas mucho- lo alcé y su cabeza golpeó suavemente el techo del auto -lo siento- (talvez en realidad no lo hacía) -eso dolerá mañana.

Me dirigí tranquilo hasta la recepción del edificio, presioné el botón de subida del ascensor con el brazo colgante de Gulf y me giré tranquilamente con una sonrisa cínica que duró hasta que me di cuenta que el guardia me miraba extrañado.

—No se preocupe, no pesa mucho— le volví a dar una sonrisa despreocupada. Él solo asintió, y después de ver preocupado al chico en mis brazos siguió con su trabajo.

Ese eran un buen empleado, se merecía un aumento por su discreción.

Llegar hasta el departamento y abrir la puerta fue un poco difícil, talvez Gulf se golpeó un poco más en otras zonas ademas de su cabeza en la subida, pero aún así pude fácilmente recostarlo en mi cama.

Sálvame (MewGulf)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora