Narra Mew:
—Ve con cuidado.
Las ramitas afiladas de la leña que Zee y yo nos alejamos para recoger lastimaban mis manos cada que halaba y presionaba para romperlas.
—No te preocupes, no creo que esta madera pueda cortarme seriamente.
Sosteniendo un palo largo en el suelo, lo partí a la mitad con mi pie.
—No me refería a eso.
Miré a Zee que se encontraba agachado amontonando la madera para amarrarla toda junta.
—¿Entonces?— pregunté confundido.
Él se levantó poniendo su cabello detrás de sus orejas, su rostro mostraba su incomodidad, pero aún así parecía querer...necesitar decirlo.
—El chico... tú...— no lograba encontrar las palabras adecuadas, se le hacía realmente difícil ponerlas en orden. Al final solo suspiró frustrado —... estás muy entregado.
Me miró con...¿Pena? ¿Miedo?
Abrí mis ojos sorprendido, talvez un poco de enojo se sentía prepararse para subir desde mi estómago.
—¿Te refieres a...?
—Gulf— dijo cortante. Al ver mi seño fruncido se apresuró para aclararse —Él es lindo, amable, humilde, nada creído...y tú...
—¿No lo merezco? ¿Es lo que tratas de decir?— interrumpí inevitablemente con mi voz más ronca.
Me voltié a seguir con nuestro trabajo de recojer palitos de madera. ¿Por qué no enfrento a mi amigo ante tal acusación? Porque muy en el fondo de mí, existe una parte temerosa de nunca llegar a ser merecedor de Gulf...lo que significa que al menos una vez, he pensado que eso es verdad.
—Claro que no— Zee negó dándome a entender que no le había atinado ni de cerca —Nadie más que yo te conoce realmente, y sé que eres un hombre bueno, nada de las estupideces que haces cambian mi punto de vista sobre tí. Sé quién eres, y cuando te veo, sinceramente deseo mirar que camines de la mano con alguien especial como dices es Gulf— alargó uno de sus brazos hasta tocar mi pecho con uno de sus dedos, presionando el lugar que guardaba dentro mi corazón —...porque el Mew escondido en el fondo lo merece.
Miré sus ojos y estos mostraban sinceridad, por supuesto, él nunca mentía ni siquiera cuando se trataba de no hacerte daño.
—Sabes que odio opinar sobre cualquier tema —giré mis ojos molesto, lo sabía, y lo odiaba, odiaba su estúpido pensamiento de que si cualquier persona dice al menos una palabra sobre algún tema, eso cambiará inevitablemente tu decisión sobre aquello, y Zee es una persona tan molesta que no quiere meterse en tu mente ni siquiera por equivocación, y digo molesta porque no puede sugerir el color de corbata que te sienta mejor, porque..."es tu decisión" —...pero...— lo miré expectante ahora sabiendo que si lo decía, es porque realmente, indudablemente, es importante —...lo menciono solamente para que vayas con cautela, con cuidado, no entregues todo de una vez, no dejes que te lastimen como hace tres años...¿Puedes hacer eso por mí si no lo haces por ti? Ambos sabemos que quien dejará su trabajo abandonado para lidiar con el Mew destrozado y ahogado en un mar de depresión llamado alcohol, seré yo y no ese inútil de Chris.
"Él solo no está hecho para este tipo de situaciones" quise defender a Chris, pero dejé ese pensamiento dentro de mi cabeza.
—Lo dices porque no conoces a Gulf, mírate, tú tienes más miedo que yo— dije intentando quitarle importancia, aludiendo a que solo era paranoia, ya que no conoce de primera mano la situación.
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Sálvame (MewGulf)
RomanceGulf es un chico joven que a su corta edad paga el precio de no haber curado bien sus heridas, su ansiedad no lo deja vivir en paz, sabe que él es su propio enemigo en un mundo lleno de buitres, pero aún así, luchará por esa tranquilidad y buen sent...